Cindy Núñez relata 40 años como trabajadora sexual en Santa Fe, Bogotá

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Cindy Núñez, una mujer trans de 63 años reconocida como una de las trabajadoras sexuales más famosas del barrio Santa Fe en el centro de Bogotá durante más de cuatro décadas, compartió detalles impactantes de su vida en el podcast Más allá del silencio, conducido por Rafael Poveda. En su testimonio, relató su extensa trayectoria marcada por discriminación, violencia y profundos cambios en el barrio Santa Fe, donde comenzó su historia tras abandonar su hogar a los 11 años por amenazas de muerte de sus padres, quienes no aceptaban su identidad porque, según ellos, si no era hombre, macho con mujer e hijos, no sería su hijo. Inicialmente trabajó como cocinera en una casa de trabajo sexual en Puerto López, antes de migrar a Europa —Italia, Francia, Alemania y España—, donde laboró en la clandestinidad sin documentos durante los años ochenta, época de represión donde las detenían por vestir prendas femeninas, algo considerado delito y prohibido.

Tras regresar a Colombia en 2011, Núñez encontró un Santa Fe transformado por el tráfico de drogas, actores criminales y la llegada de migrantes, lo que alteró las dinámicas laborales e incrementó los riesgos para las trabajadoras sexuales. Ella ha sobrevivido a balazos y apuñalamientos, presenciado muertes de compañeras —a las que incluso recogieron y enterraron entre ellas mismas— y ocultaba armas bajo la lengua para defenderse. Hoy, los pagos por servicios oscilan entre 10.000 y 15.000 pesos, y separa su trabajo entre mujeres trans y cisgénero debido a barreras sociales y preferencias de clientes. Santa Fe, zona de tolerancia con comunidades trans, trabajo sexual y narcotráfico, resalta en su relato la exclusión y resiliencia de estas mujeres, que se protegen mutuamente ante la falta de oportunidades laborales solo por ser travestis.

Una vida de lágrimas, sangre y cambios dolorosos en Santa Fe

En el podcast, Cindy Núñez expresó su tristeza por el deterioro del barrio que considera su casa después de más de 40 años, donde derramó lágrimas, sangre y recogió a compañeras muertas o heridas en las esquinas. Recordó cómo antes salían bien vestidas, cachesudas, sin exponerse desnudas como ahora, culpando en parte a maricas y migrantes por dañar el Santa Fe. La represión policial de antaño y la actual inseguridad han limitado su libertad, donde cualquier movimiento puede llevar a destierro o muerte.

«Ya no tenemos una libertad, ya no podemos sentirnos libres, (…) cualquier movimiento y la sacan, la destierran a una, si no la matan».

Cindy Núñez, trabajadora sexual

«Nos tenían detenidas allá por tener prendas femenina. Eso era un delito, era prohibido».

Cindy Núñez, trabajadora sexual

Su historia subraya la necesidad que las impulsa al trabajo sexual, ya que por ser travestis no reciben otras oportunidades. Actualmente participa en talleres de modistería Olimpo para mujeres trans, buscando alternativas en medio de un barrio que le duele ver cambiado. Este testimonio, extraído del podcast Más allá del silencio, pone en evidencia las luchas invisibles de la comunidad trans en Santa Fe.

«A nosotros nos toca es por necesidad, porque por solo ser travesti no nos dan las oportunidades, no nos dan trabajo».

Cindy Núñez, trabajadora sexual

«Hemos tenido que recogerlas y enterrarlas entre nosotras mismas».

Cindy Núñez, trabajadora sexual

El relato de Núñez no solo revive memorias personales, sino que ilustra la evolución de Santa Fe como epicentro de vulnerabilidades, donde la criminalidad y la migración han erosionado la dignidad laboral que alguna vez prevaleció.

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