Colombia ha registrado un incremento del 7,6 por ciento en los homicidios durante los tres primeros años del gobierno de Gustavo Petro, entre agosto de 2022 y agosto de 2025, con un total de 40.663 víctimas fatales, según un informe del Centro de Paz y Seguridad de la Universidad Externado de Colombia. Este análisis, basado en datos de homicidios por periodos presidenciales, revela focos de violencia concentrados en la Región Caribe, Catatumbo en Norte de Santander y la Región Centro Oriente, impulsados por disputas entre el Clan del Golfo, disidencias de las FARC, el ELN y bandas urbanas, así como por rentas ilícitas derivadas de la minería ilegal y el narcotráfico, en medio de una débil presencia estatal.
En comparación con gobiernos anteriores, el periodo de Petro supera los 37.795 homicidios del mandato de Iván Duque entre 2018 y 2022, un aumento de 2.862 casos, y los 36.646 del segundo gobierno de Juan Manuel Santos de 2014 a 2018, con 4.017 más. El promedio anual bajo Petro alcanza los 13.554 homicidios, por encima de los 12.598 de Duque y los 12.215 de Santos. El último año analizado, de agosto de 2024 a agosto de 2025, registró 13.817 muertes violentas, equivalente a una cada 39 minutos, marcando la mayor cifra desde 2014 y una tendencia al estancamiento en la reducción de la violencia letal pese a las políticas de paz implementadas.
Regiones y ciudades con mayores incrementos
La Región Caribe vio un salto drástico de 6.512 homicidios bajo Duque a 9.382 con Petro, un aumento de 2.870 casos, destacando Bolívar con 870 más, un 72,7 por ciento; Magdalena con 811 adicionales, un 95 por ciento, y Atlántico con 803, un 48,7 por ciento. En Norte de Santander, hubo 141 homicidios más en el último año, un 33,8 por ciento, con Tibú pasando de 29 víctimas en 2024 a 129 en 2025, alcanzando una tasa de 187,5 por cada 100.000 habitantes. La Región Centro Oriente subió de 4.764 a 5.194 casos, 430 más. Aunque hubo descensos notables como en Antioquia con 1.407 menos, un 21,3 por ciento; Nariño con 508 menos, un 29,6 por ciento, y Córdoba con 230 menos, un 21,7 por ciento, ciudades como Bogotá aumentaron de 3.198 a 3.427 homicidios, un 7,16 por ciento, junto con Cartagena, Valledupar, Santa Marta, Barranquilla, Soledad, Cúcuta y Villavicencio, mientras Cali, Medellín, Montería y Bello registraron bajas.
«la violencia homicida no descendió con la política de Paz Total»
Centro de Paz y Seguridad de la Universidad Externado de Colombia
El informe también destaca que más de 300 municipios en Boyacá y Cundinamarca reportaron cero homicidios, y aunque la reducción histórica de la violencia letal ha sido de solo 0,2 puntos por año entre 2010 y 2024, una tercera parte de los homicidios ocurre en grandes urbes, con municipios pequeños como Tame, Puerto Tejada, Candelaria y Corinto exhibiendo tasas hasta seis veces el promedio nacional. Encuestas como la Invamer Poll indican que el 61,5 por ciento de los colombianos considera que el país ha regresado a niveles de violencia del pasado. Las proyecciones son sombrías: una tasa de 10 homicidios por 100.000 habitantes recién en 2080, con hasta 250.000 muertes adicionales en los próximos 20 años si persiste esta meseta prolongada en la violencia.
