El hundimiento de la reforma tributaria en el Congreso de la República, ocurrido durante la sesión del martes 9 de diciembre, ha obligado al Gobierno colombiano a replantear por completo su estrategia fiscal para el año 2025, según lo advertido por el economista y profesor de la Universidad Javeriana, Jorge Restrepo. Esta decisión legislativa impide recaudar los fondos previstos en la reforma, que ascendían a 16,5 billones de pesos, esenciales para cubrir el presupuesto nacional del próximo año.
La reforma buscaba generar recursos adicionales para financiar el gasto público planeado, pero su rechazo deja al Ejecutivo ante un dilema inmediato que repercutirá en la política económica y en la vida cotidiana de los colombianos. Sin estos ingresos, el Gobierno deberá enfrentar la imposibilidad de ejecutar plenamente su presupuesto, lo que genera preocupación por las implicaciones en servicios públicos, inversión social y estabilidad financiera.
Consecuencias y opciones para el Gobierno
En este escenario, el economista Jorge Restrepo enfatiza que el Gobierno tendrá que optar por un recorte significativo en el gasto proyectado para el presupuesto general de la nación en 2025. Entre las alternativas que se barajan figura la posibilidad de decretar una emergencia económica para implementar tributos extraordinarios, aunque esta medida estaría sujeta a la revisión de la Corte Constitucional. Otras opciones extremas, como una cesación de pagos, conllevan riesgos elevados y escrutinio constitucional, lo que complica aún más el panorama fiscal.
“Tendrá que hacer un recorte del gasto que planeaba en el presupuesto general de la nación el año que viene”
Jorge Restrepo, economista y profesor de la Universidad Javeriana
“Permite que el Gobierno de aquí hasta allá recaude esa plata”
Jorge Restrepo, economista y profesor de la Universidad Javeriana
Este revés legislativo no solo altera los planes inmediatos del Gobierno, sino que abre un debate nacional sobre la sostenibilidad fiscal en un contexto de crecientes demandas sociales y económicas, donde cualquier decisión tomará en cuenta las repercusiones directas en la población.

















