La entidad ambiental avanza en la protección de páramos y bosques altoandinos, ecosistemas altamente vulnerables a la expansión del retamo espinoso.
El retamo espinoso (Ulex europaeus) es una de las especies invasoras más perjudiciales para los ecosistemas de montaña en Colombia. Su rápida propagación desplaza la vegetación nativa, altera los suelos y aumenta el riesgo de incendios por su alta inflamabilidad. También perjudica la seguridad alimentaria de las comunidades rurales al afectar la productividad de los suelos y limitar las actividades agropecuarias.
En ese contexto, Corpocaldas logró la erradicación de un foco de esta planta en la vereda El Pindo, una zona estratégica por su cercanía al Complejo de Páramo Los Nevados. La jornada se desarrolló en los sectores El Parnaso y La Aldea con la participación de la Alcaldía Municipal, Aquamaná, guardabosques y trabajadores del predio El Parnaso.
Jorge Hernán Lotero Echeverri, subdirector de Biodiversidad y Ecosistemas de Corpocaldas, indicó que este era el único punto identificado en el departamento con proximidad al complejo de páramo, lo que hacía prioritaria su intervención. Aseguró que la articulación con la administración local permitió avanzar de manera efectiva en la erradicación.
Durante el operativo se intervinieron 85,82 m² de retamo espinoso, una superficie que representaba un riesgo para la biodiversidad y para la estabilidad del ecosistema de alta montaña.
La autoridad ambiental proyecta continuar con estas labores en San Félix y Marulanda, donde ya se establecieron convenios con los municipios y se realizan pruebas piloto para evitar el avance de la especie.
El Instituto Humboldt y el Ministerio de Ambiente catalogan al retamo espinoso como una de las invasoras más agresivas del país por su impacto en páramos y bosques altoandinos. Entre los efectos más relevantes se encuentran el desplazamiento de especies nativas, la mayor probabilidad de incendios y las afectaciones sobre la producción agrícola.

















