El proceso avanza con buenos precios, calidad del grano y disponibilidad de mano de obra en la mayoría de municipios del departamento.
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El departamento de Caldas vive un balance favorable en el desarrollo de la cosecha cafetera del segundo semestre de 2025. En la mayoría de municipios del centro y sur ya se superaron los picos de recolección y, aunque aún persisten graneos en algunas fincas, la actividad se ha desarrollado con normalidad y bajo condiciones climáticas propicias.
En las zonas norte y oriente también se reportan buenos pases de cosecha, lo que refleja un comportamiento equilibrado y constante en la producción regional. En términos generales, la actual temporada deja resultados positivos en calidad del café, conversión del grano y estado fitosanitario de los cultivos.
“Afortunadamente no hemos tenido afectaciones significativas por plagas o enfermedades, y las conversiones han sido buenas”, destacaron desde la institucionalidad cafetera del departamento. Este panorama se fortalece con el buen precio del café, que ha permitido una mayor rentabilidad para los caficultores caldenses.
Uno de los aspectos más relevantes ha sido la disponibilidad de mano de obra para la recolección, un desafío que en otras épocas afectó el desarrollo de la cosecha. Además, la seguridad en las zonas cafeteras se ha garantizado mediante la articulación entre la Federación Nacional de Cafeteros, la Policía Nacional, el Ejército y las autoridades locales.
“El Plan Cosecha incorpora un componente de seguridad que está funcionando bien; estamos acompañando a las comunidades en fincas y veredas para brindar tranquilidad durante esta temporada”, indicó el líder departamental de Extensión Rural, Luis Fernando Giraldo Castellanos.
Paralelamente, durante los fines de semana se han habilitado puestos de pago en varios municipios, con el propósito de facilitar los pagos directos de jornales a los recolectores. Estas jornadas ya se han realizado en localidades como Chinchiná, Manizales y Neira, y continuarán en otras zonas del departamento hasta finales de noviembre.
En cuanto a la producción, el 2025 presenta una leve disminución frente al año anterior. “El 2024 tuvo floraciones más concentradas, lo que permitió una mayor producción. En esta ocasión las floraciones fueron más dispersas, generando un volumen menor”, puntualizó Giraldo Castellanos.
Sin embargo, la buena calidad del grano y los precios favorables han compensado esta diferencia, consolidando un cierre de año optimista para la caficultura caldense.
















