Detenido Christopher N., alias «el Comandante», señalado como el presunto autor intelectual del crimen que costó la vida a Bayron Sánchez Salazar, conocido como B King, y a Jorge Luis Herrera Lemos, alias DJ Regio Clown, cuyos cuerpos desmembrados fueron hallados el 22 de septiembre de 2025 en Cocotitlán, Estado de México. En paralelo, la fiscalía informó la detención de 16 personas vinculadas a una organización criminal, con líneas de investigación que apuntan a vínculos entre el narcotráfico y la extorsión. La desaparición de las dos víctimas fue reportada el 16 de septiembre; se sabe que B King y su mánager llegaron a la Ciudad de México el 11 de septiembre, y que sus cuerpos fueron encontrados tras una secuencia de traslados que desembocó en el Estado de México.
La investigación ha permitido delinear una red operativa en la que la escena musical parece entrelazarse con actividades delictivas, en particular con el grupo Unión Tepito. Según las pesquisas, la desaparición se produjo tras un encuentro con el Comandante la noche del 16 de septiembre en un gimnasio de Polanco; posteriormente se inició un traslado hacia el Estado de México. Las cámaras de seguridad han identificado un Mercedes Benz gris como el vehículo que transportó a las víctimas, mientras que un testigo refiere que los cuerpos fueron trasladados en una Ford Expedition roja y luego abandonados en la entidad vecina. Mariano N., supuesto chofer y asistente de los músicos, habría sido asignado a estas tareas a partir del 11 de septiembre; El Apá, líder del grupo y dueño de un taller de reciclaje en la colonia Renovación de la Ciudad de México, aparece como una figura central en la estructura criminal, mientras que El Pantera figura como un miembro relevante del mismo. En total, 16 personas han sido detenidas, y cuatro de ellas —Angélica Irais «N», Luis Alberto «N», José Luis «N» y Jaime «N»— permanecen recluidas en el penal de Chalco, a la espera de procedimientos judiciales.
Detención de «el Comandante» amplía la red de implicados y revela tensiones entre la escena musical y el crimen organizado
Entre los elementos que fortalecen la hipótesis de la investigación hay indicios de que la operación se sostiene sobre una deuda con un grupo delictivo y posibles pagos por servicios criminales, en un marco en el que el vínculo con El Pantera aparece como un factor de presión. En este contexto, el costo de aquel enfrentamiento parece haber sido elevado, con una presunta suma de 200,000 pesos mexicanos vinculada a los hechos. Como parte de las pruebas, la evidencia forense incluye bolsas de plástico y rafia halladas en la escena, además de rastros de ADN de Bayron Sánchez en el vehículo Mercedes Benz gris y en el lugar del hallazgo. Un testigo clave señaló que los homicidios habrían ocurrido en la casa de El Apá, propietario del taller de reciclaje en Renovación, lo que aporta una ruta geográfica para la investigación y posibles testigos que deberán declarar ante las autoridades.
«La fiscalía mexicana sostiene que ese encuentro ocasionó en su traslado hacia el Estado de México, donde posteriormente fueron asesinados» – El Universal, citando la carpeta de investigación
Las declaraciones y mensajes recuperados durante la indagación también han ofrecido una visión polémica de la dinámica entre Regio Clown y sus asociados. En mensajes revelados por el periodista Carlos Jiménez, Regio Clown habría escrito: «me cuidaré mucho, no confío en nadie, pero hay que hacer negocios». Paralelamente, un recuento de la investigación indica que El Pantera amenazó a todos los implicados: “El Comandante”, “El Apá”, Mariano N. y otros, advirtiéndoles que mataría a quien revelara información o permaneciera en la zona antes de diciembre.
En este contexto, el caso ha sido considerado un claro ejemplo de cómo procesos criminales, delitos de narcotráfico y extorsión pueden entrecruzarse con dinámicas de la escena musical. La detención de Christopher N. y la desarticulación de la red criminal agrandada con la captura de 15 coautores potenciales no sólo busca esclarecer la muerte de B King y Regio Clown, sino que también abre una nueva línea de investigación sobre posibles conexiones entre artistas, promotores y redes delictivas. La noticia, que llega desde el Estado de México hacia la capital y a nivel nacional, advierte sobre la necesidad de una coordinación más estrecha entre las autoridades federales, estatales y municipales para frenar estas dinámicas de violencia y extorsión que tocan diversos sectores de la sociedad.














 
															 
															 
															 
															 
															

