Deuda del sector farmacéutico en Colombia alcanza 4,2 billones, compromete suministro y acceso a medicamentos

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Afidro alerta que la deuda del sector farmacéutico en Colombia alcanzó 4,2 billones de pesos en el segundo trimestre de 2025, un monto que compromete la cadena de suministro y el acceso a medicamentos. La advertencia fue realizada por Ignacio Gaitán, presidente de Afidro, durante la presentación del estudio de cartera en el AFI Summit 2025, contextualizado por la situación de Nueva EPS y por un deterioro estructural de las finanzas del sector que se agrava por un desfinanciamiento de la cadena de pagos.

El informe de cartera de Afidro estima que la deuda total del sistema de salud en su conjunto asciende a 30 billones de pesos, de los cuales 24 billones corresponden a obligaciones con proveedores y prestadores de servicios, y 4 billones a la deuda de la industria farmacéutica. Dentro de ese cuadro, la deuda de la industria farmacéutica se mantiene en 4 billones de pesos y la de los gestores farmacéuticos llega a 2,73 billones, lo que representa el 64% del total del sector. La cartera vencida se sitúa en 35,3% y, como proyección para 2025, se esperan 6.084 cierres de servicios de salud, una cifra que refleja un incremento de 33% en los niveles de insatisfacción. Paralelamente, más de un millón de colombianos se quejan por el acceso a servicios y tratamientos, y la dificultad para conseguir citas médicas ha aumentado en más de un 30%.

Impacto en la cadena de pagos y en el acceso a la atención

La lectura de Afidro señala que el deterioro de la cadena de pagos se traduce en efectos concretos para la población: largas filas diarias en dispensarios farmacéuticos, demoras en la atención y un incremento sostenido en las quejas por acceso a tratamientos. En conjunto, el sistema de salud enfrenta una deuda acumulada de 30 billones de pesos, con 24 billones debidos a proveedores y prestadores y 4 billones vinculados a la industria farmacéutica, un desbalance que afecta la producción, la logística y la provisión de insumos cruciales para la atención sanitaria de los colombianos.

«Como la Contraloría lo indicó hace unas semanas con el caso de la Nueva EPS, lo que estamos viendo es un desfinanciamiento que afecta dos temas fundamentales: el acceso a la prestación de servicios y el acceso a medicamentos. Cuando se rompe la cadena financiera, todo el sistema se ve comprometido» – Ignacio Gaitán, presidente de Afidro

En este marco, las proyecciones y realidades descritas por Afidro subrayan que el desfinanciamiento no es aislado, sino un detonante de tensiones en la atención y en la disponibilidad de medicamentos. La organización advierte que, si no se endereza la cadena de pagos y se refuerzan flujos financieros estables, podrían agravarse las cierres de servicios y las filas en dispensarios, con un impacto directo en la capacidad de la población para acceder a medicamentos y tratamientos esenciales.

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