La deuda total del sector eléctrico colombiano, que alcanza 6,2 billones de pesos, amenaza la sostenibilidad del servicio y podría traducirse en incrementos tarifarios, especialmente para usuarios de estratos 1 y 2, según advierte José Camilo Manzur, director ejecutivo de la Asociación Colombiana de Distribuidores de Energía Eléctrica, Asocodis. El análisis presentado por la gremial desglosa la deuda en tres componentes —subsidios, deuda oficial y la opción tarifaria— y señala que, a la luz de los saldos actuales, la región Caribe y el Chocó podrían verse particularmente impactados por las próximas regulaciones y cambios fiscales que se ven en el radar nacional.
El desglose de la deuda de 6,2 billones revela que cerca del 70% es deuda pública, abarcando montos a nivel nacional y territorial. Los subsidios suman 2,4 billones, la deuda oficial 1,3 billones y la opción tarifaria 2,5 billones. Afinia concentra casi el 40% de la cartera, lo que la vuelve una de las empresas más expuestas al deterioro de ingresos. El análisis estima que los recursos por recuperar rondan dos años de ingresos brutos de remuneración para las empresas del sector, y las proyecciones indican que los saldos podrían llegar a 7 billones en diciembre. Además, la deuda por subsidios podría crecer aproximadamente 300.000 millones de pesos mensuales; si esos subsidios se financian mediante la tarifación, el incremento promedio en la factura de un usuario de estrato 1 podría situarse alrededor del 90%, mientras que la región Caribe, para estratos 1 y 2, podría registrar aumentos de hasta 95%. En Aire-e, el ingreso para el prestador se reduciría en cerca de 35%, y el ahorro para un usuario de estrato 1 sería de apenas 6.000 pesos al mes; si se eliminan subsidios, la factura podría subir unos 55.000 pesos mensuales, es decir, cerca de un 95% de incremento. En el Chocó, para un estrato 1, el incremento podría alcanzar el 140%, equivalentes a alrededor de 74.000 pesos mensuales.
El análisis también indica que siete de las 21 empresas agremiadas, que representan aproximadamente el 45% de la demanda, tendrían reducciones de ingresos superiores al 30%. La pérdida de ingresos para el sector podría superar 1 billón de pesos anuales y, en un periodo tarifario completo, bordearía los 5 billones. Un componente relevante es la reducción propuesta por la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) al componente de comercialización, que podría variar entre un 33% y 45%, con impactos en ingresos que superarían el billón anual. En paralelo, la llamada Regla Caribe representa una resolución temporal; sin embargo, la definición final de la regulación estará a cargo de la Creg en los próximos 30 días, lo que añade incertidumbre para las distribuidoras fuera de esa región. Ante este escenario, Asocodis advierte sobre riesgos de nulidad y restablecimiento de derechos si los procedimientos no se corrigen en tiempo y forma.
Deuda, subsidios y regulación: el futuro del servicio eléctrico colombiano
«en todo el país enfrentamos una situación financiera muy compleja» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«de esos 6,2 billones, cerca del 70% es deuda pública, tanto del orden nacional como territorial» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«Priorizar su compromiso de seguir prestando el servicio a todo el mercado, lo que evidentemente afectaría que puedan continuar las empresas financiando los subsidios (que es una obligación del Estado) y esto podría implicar un incremento promedio alrededor del 90% en la factura de un usuario de estrato 1» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«en el caso de Afinia, el pago anual pasaría de $100.000 millones a $200.000 millones, aun cuando la empresa no registra utilidades. Eso resulta completamente desproporcionado» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«sería una estocada final para el sector, especialmente para los más pequeños, porque reduce sus ingresos en cerca de $1 billón anual. En un periodo tarifario completo, eso equivaldría a una pérdida de 5 billones, lo que haría insostenible la financiación de los subsidios» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«la reducción representaría apenas entre $2.400 y $2.500 mensuales en la factura de un usuario de estrato uno. Es decir, una disminución poco significativa para el hogar, pero devastadora para las empresas prestadoras del servicio» – José Camilo Manzur, director ejecutivo de Asocodis
«La Comisión debe conceder a las empresas la actuación administrativa y los recursos de la vía gubernativa, para aprobar los costos y gastos que debe utilizar cada empresa para calcular las componentes de la estructura de tarifas de la comercialización» – Asocodis
«no se ajusta a las disposiciones legales al pretender, mediante circular, evadir el procedimiento de expedición de actos tarifarios de carácter particular» – Asocodis
«demandas de nulidad y restablecimiento de derechos, así como medidas cautelares» – Asocodis
La coyuntura llega en un momento en que las autoridades revisan la regulación vigente para la región Caribe y el conjunto del país, con la esperanza de evitar un desbalance que ponga en riesgo la financiación de los subsidios. La definición regulatoria por parte de la Creg, prevista en 30 días, será determinante para las finanzas de las distribuidoras y para el bolsillo de los hogares de los estratos más bajos. En La Veintitrés Manizales seguimos de cerca este tema, aportando el enfoque local y el impacto social para las familias de Manizales y la región, en un contexto donde la región Caribe ya cuenta con alivios temporales mientras el resto del país observa con atención cómo se define el marco regulatorio y su incidencia en las tarifas y en la continuidad del servicio.
















