En un fin de semana marcado por la violencia en el área metropolitana de Bucaramanga, dos jóvenes perdieron la vida en sendos ataques armados el sábado 22 de noviembre de 2025. Eduar Jaenpierre Duarte Velázquez, de 19 años, fue hallado sin vida con una herida de arma de fuego en la cabeza en una cancha deportiva del sector Albania, en el barrio Morrorrico de Bucaramanga. La víctima llegó al lugar alrededor de las 5:30 de la tarde en motocicleta junto a un amigo, con quien se reunió posteriormente con dos hombres y una mujer. Minutos antes de las 8:30 de la noche, Eduar llamó a su amigo alertándolo sobre la presencia de dos sujetos armados, exclamando “Me quieren matar”, pero este no pudo acudir de inmediato por estar ocupado y encontró el cuerpo aproximadamente una hora después.
La policía realiza inspección criminalística en la escena y verifica los antecedentes de la víctima, quien registraba cuatro anotaciones judiciales por estupefacientes y llevaba apenas tres meses viviendo en la zona. Las autoridades investigan el móvil, que apunta a un posible ajuste de cuentas relacionado con actividades ilícitas. La comunidad del barrio Morrorrico exige un rápido esclarecimiento del hecho y mayor presencia policial para garantizar la seguridad en el sector.
Otra víctima en Floridablanca por disputa de microtráfico
Horas más tarde, cerca de las 11:30 de la noche del mismo día, Mauricio Palacio Gómez fue asesinado de seis disparos por dos sicarios que se movilizaban en motocicleta en el barrio La Cumbre de Floridablanca, Santander. El ataque ocurrió durante un presunto intercambio de dinero, captado por cámaras de seguridad que registraron tanto la llegada como la huida de los perpetradores. La víctima, quien salió alterado de su residencia en el asentamiento Villa Esperanza tras una discusión con su pareja, fue trasladada a la Clínica Foscal, donde falleció poco después. Fuentes policiales vinculan el homicidio a la venta de estupefacientes y a un ajuste de cuentas entre bandas rivales que se disputan el control territorial en Villa Esperanza.
“Todo apunta a que este hecho obedece a un ajuste ilegal de cuentas entre grupos que se disputan el control del expendio de drogas en Villa Esperanza. La estructura de Los del Sur quiere apoderarse de esa zona, donde ya controlan cerca del 80% del microtráfico en el área metropolitana”
William Quintero, brigadier general y comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga
Las autoridades analizan las grabaciones de las cámaras y han incrementado el patrullaje en las zonas críticas para prevenir nuevos incidentes. Estos dos homicidios resaltan la creciente ola de violencia asociada al microtráfico en la región, donde el testimonio del amigo de Eduar Jaenpierre resulta clave para reconstruir los hechos y el testimonio clave para avanzar en las investigaciones.
