Estados Unidos ha designado al Clan del Golfo, también conocido como EGC, Banda Criminal de Urabá, Clan Úsuga, Los Urabeños o Los Autodefensas Gaitanistas, como Organización Terrorista Extranjera (FTO) y Organización Terrorista Global Especialmente Designada (SDGT), una medida que impone sanciones financieras y legales drásticas y complica los diálogos de paz impulsados por el Gobierno de Gustavo Petro. Esta decisión del Departamento de Estado y la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) llega justo después de que el pasado 5 de diciembre de 2025, en Doha, Catar, se firmaran protocolos clave entre la Consejería Presidencial para la Paz, liderada por Otty Patiño, y el grupo armado, incluyendo el Protocolo de Comunicaciones y el Protocolo de Seguimiento, Monitoreo y Verificación (SMV), con miras a la concentración gradual de combatientes a partir del 1 de marzo de 2026 en tres Zonas de Ubicación Temporal (ZUT) establecidas en Belén de Bajirá y Unguía, en Chocó, y Tierralta, en Córdoba.
La designación terrorista se fundamenta en las actividades del Clan del Golfo, que cuenta con miles de miembros y se dedica al tráfico de cocaína, así como a atentados contra funcionarios públicos, fuerzas del orden y civiles, lo que amenaza la estabilidad regional y choca con la política de ‘Paz Total’ del Gobierno Petro. Los acuerdos en Doha incluyen mecanismos tripartitos con la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA (Mapp/OEA) para informar avances, prevenir incidentes y verificar el cumplimiento, con protocolos operativos listos antes del 3 de febrero de 2026 y informes bimestrales. Además, se suspendieron temporalmente órdenes de captura y extradición, y se entregó un listado inicial de integrantes a Otty Patiño.
Detalles de los protocolos y mecanismos de verificación
El Protocolo de Comunicaciones establece el uso de mensajes conjuntos, redes sociales, imágenes y ruedas de prensa para mantener informada a la opinión pública, mientras que el Protocolo SMV crea una estructura tripartita para el monitoreo. Esta inclusión en la lista SDN de OFAC implica el bloqueo de activos y restricciones financieras internacionales, sumando al Clan del Golfo a otras organizaciones como el ELN, las Farc-EP y la Segunda Marquetalia, ya sancionadas por Estados Unidos. Los acuerdos se alcanzaron en Doha precisamente antes de esta designación, generando inquietud en comunidades como la de Tierralta, donde una ZUT coincide con la jornada electoral, lo que llevó a José David Ortega, de la Asociación de Campesinos del Sur de Córdoba, a solicitar una prórroga de diez días para el ingreso postelectoral.
“No es solo un cartel de drogas, es una Organización Terrorista Extranjera que ha infligido un sufrimiento incalculable al pueblo colombiano y amenaza la estabilidad de nuestra región”.
Alta fuente del Departamento de Estado
Esta medida endurece las restricciones legales y financieras para el grupo, que ahora enfrenta mayores obstáculos en sus procesos de concentración y sometimiento justo, en un contexto de tensiones por su impacto en la región y los esfuerzos por la paz en Colombia.
“Estados Unidos seguirá utilizando todas las herramientas disponibles para proteger a nuestra nación y detener las campañas de violencia y terrorismo perpetradas por cárteles internacionales y organizaciones criminales transnacionales”.
Departamento de Estado

















