Países adoptan medidas drásticas mientras el mundo enfrenta la crisis del plástico. En Colombia desde el domingo quedará prohibida la producción y el uso de plásticos de un solo uso.
Cada 3 de julio, se conmemora el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico, un esfuerzo global para combatir el uso indiscriminado de estas amenazas ambientales.
A esta lucha se unen comunidades de todo el mundo y en este entramado Colombia no es la excepción. De hecho, desde este 7 de julio (domingo) quedará prohibida la producción y el uso de plásticos de un solo uso, como bolsas para embalar frutas y verduras, pitillos, platos, tenedores y cucharas, entre muchos otros. Un paso definitivo para impulsar la sostenibilidad y la economía circular.
Amparado en la Ley 2232 de 2022, el Gobierno de Colombia estableció medidas orientadas a la reducción de la producción y el consumo de productos plásticos. La norma detalla 14 productos a los que se aplicará la prohibición y sustitución, sin embargo, serán seis los estarán prohibidos desde el domingo.
Estos son los productos plásticos de un solo uso que serán eliminados según la ley:
- Bolsas de punto de pago utilizadas para embalar, cargar o transportar paquetes y mercancías, excepto aquellas reutilizables o de uso industrial (desde el domingo).
- Bolsas utilizadas para embalar periódicos, revistas, publicidad y facturas, así como las utilizadas en las lavanderías para empacar ropa lavada (desde el domingo).
- Rollos de bolsas vacías en superficies comerciales para embalar, cargar o transportar paquetes y mercancías o llevar alimentos a granel, excepto para los productos de origen animal crudos (desde el domingo).
- Envases o empaques, recipientes y bolsas para contener líquidos no preenvasados, para consumo inmediato, para llevar o para entregas a domicilio.
- Platos, bandejas, cuchillos, tenedores, cucharas, vasos y guantes para comer.
- Mezcladores y pitillos para bebidas (desde el domingo).
- Soportes plásticos para las bombas de inflar (desde el domingo).
- Confeti, manteles y serpentinas.
- Envases o empaques y recipientes para contener o llevar comidas o alimentos no preenvasados conforme a la normatividad vigente, para consumo inmediato, utilizados para llevar o para entregas a domicilio.
- Láminas para servir, empacar, envolver o separar alimentos de consumo inmediato, utilizados para llevar o para entrega a domicilio.
- Soportes plásticos de los copitos de algodón o hisopos flexibles con puntas de algodón (desde el domingo).
- Mangos para hilo dental o porta hilos dentales de uso único.
- Empaques, envases o cualquier recipiente empleado para la comercialización, al consumidor final, de frutas, verduras y tubérculos frescos que en su estado natural cuenten con cáscaras; hierbas aromáticas frescas, hortalizas frescas y hongos frescos.
- Adhesivos, etiquetas o cualquier distintivo que se fije a los vegetales.
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Esta normativa tiene el objetivo de garantizar que no haya “fugas de plástico al ambiente”, y la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales será la entidad encargada de supervisar el cumplimiento de estas nuevas disposiciones.
La ministra de Ambiente, Susana Muhamad, declaró en días pasados la importancia de estas acciones e indicó que “Colombia tiene un proceso de manufactura de plástico a partir de las refinerías. Lo importante es que el plástico utilizado sea reciclable y provenga de la cadena nacional, cerrando el ciclo de uso y producción”.
Este paso que se da en el país es el primero de una caminata que puede durar seis años hacia la eliminación total de los plásticos de un solo uso.
En 2015, según cifras oficiales, se entregaron más de mil millones de bolsas plásticas en puntos de venta de todo el país, sin embargo, en 2020 se dejaron de comprar 714 millones.
Multas y sanciones
La normativa contempla multas, decomisos y clausuras para quienes incumplan la ley de plástico de un solo uso. Las sanciones incluyen:
- Multas económicas: Desde 100 hasta 50.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes.
- Decomiso de productos: Cualquier plástico prohibido encontrado en posesión.
- Clausura temporal: Hasta un mes para establecimientos que incumplan la normativa.
- Clausura definitiva: Para infracciones graves o reiteradas.
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Una lucha mundial
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Países pioneros como Francia e Italia han dado un paso adelante prohibiendo la producción de bolsas de plástico, marcando un hito significativo en la reducción de su consumo. Otros, como el Reino Unido, Portugal y Suecia, han implementado impuestos para desincentivar su uso, mientras que en Finlandia y Alemania, los acuerdos voluntarios han sido clave en la lucha contra este problema global.
La razón de la alarma es clara: las bolsas de plástico tardan más de 500 años en descomponerse, con cada persona utilizando en promedio unas 230 bolsas anualmente, sumando más de 500 billones en todo el mundo. Esta no-biodegradabilidad ha convertido a estas bolsas en una amenaza omnipresente que afecta no solo a nuestro planeta, sino a todas las formas de vida que lo habitan.
Los océanos, receptores de aproximadamente 12 millones de toneladas de plástico anualmente, están particularmente en riesgo. Estos desechos representan una amenaza severa para los ecosistemas marinos y las especies que dependen de ellos, con estudios revelando que uno de cada seis peces vendidos en mercados contiene microplásticos en sus estómagos, marcando la entrada del plástico en la cadena alimentaria.
Greenpeace advierte que la producción global de plástico podría alcanzar los 500 millones de toneladas para 2020, subrayando la urgencia de actuar. En un mundo cada vez más consciente de su huella ambiental, el Día Internacional Libre de Bolsas de Plástico sirve como un recordatorio crucial de que la responsabilidad colectiva y las acciones concretas son esenciales para preservar nuestro planeta para las generaciones futuras.
