En la madrugada del 14 de diciembre de 2025, autoridades policiales y Medicina Legal hallaron cuatro cadáveres con heridas producidas por arma de fuego en diferentes sectores del área metropolitana de Cúcuta, en Norte de Santander. Estos macabros descubrimientos ocurrieron en medio de un violento ataque armado atribuido al Ejército de Liberación Nacional (ELN) contra la estación policial de Puerto Santander, perpetrado a las 2:25 a.m. y que dejó como saldo un civil muerto, identificado como Agustín Pabón, conductor de una ambulancia.
Los cuerpos fueron localizados en La Playita, en el sector de La Parada en Villa del Rosario; a un costado de la vía San Gerardo-El Cerrito; y en El Pórtico, una zona rural de Cúcuta. Entre los detalles preliminares, se destaca un joven de aproximadamente 25 años con un disparo en la cabeza en La Playita, otro de unos 20 años junto a la carretera en la vía San Gerardo-El Cerrito, con la posibilidad de un segundo cadáver en las inmediaciones, y un tercero en El Pórtico. Los cadáveres fueron trasladados en coches fúnebres a las instalaciones de Medicina Legal para su identificación formal.
Ataque repelido y evidencia del ELN
El asalto a la estación policial en Puerto Santander se extendió entre 15 y 20 minutos, con ráfagas de fusil que fueron repelidas por los uniformados de servicio. Cerca de una subestación en la zona se encontró una bandera alusiva al ELN, mientras que en la vía Cúcuta-Pamplona, específicamente en Villa Marina, apareció un cilindro con insignias de la guerrilla, lo que refuerza la atribución del hecho a este grupo armado.
“Nuestros policías, quienes se encontraban de servicio, repelen el ataque por parte del ELN, el cual se prolongó por un espacio de 15 a 20 minutos”
Coronel Fabio Ojeda, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta
Estos eventos se enmarcan en el paro armado anunciado por el ELN, que incluye la colocación de supuestos explosivos en las vías principales del departamento, generando un incremento en la percepción de inseguridad en la región durante las fiestas de Fin de Año. Como medida de precaución, se suspendieron las operaciones de transporte intermunicipal hacia el Catatumbo hasta el 17 de diciembre de 2025, afectando la movilidad y la cotidianidad de los habitantes del área.
