“Estoy preparado para ser Presidente”, Sergio Fajardo

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Comenzó un nuevo capítulo en la vida de Sergio Fajardo Valderrama, exalcalde de Medellín, exgobernador de Antioquia y excandidato presidencial, quien lleva 25 años vinculado con la vida política del país. Fajardo, quien ahora encabeza las encuestas, regresa con la intensión clara de ser el próximo presidente de los colombianos.

En este diálogo con La Veintitrés, recordó sus inicios, “empezamos en Medellín de cero, decidimos formar un movimiento cívico independiente para participar en política, recogiendo personas de las organizaciones sociales, de las ONGs, del mundo académico, de la cultura, del emprendimiento, algunas personas de las empresas, y nos juntamos para transformar la ciudad. Cambiamos a Medellín y hemos avanzado muchísimo, y esta página viene después del 2022 y he sido dos veces candidato presidencial 2018 y 2022”.

Afirma que son muchas lecciones aprendidas en esas dos últimas experiencias, “en particular la de 2022, que fue un fracaso político desafortunado en muchos sentidos. Pensé incluso en escribir un libro con la historia de lo ocurrido en esa dos candidaturas, pero decidí no hacerlo; para qué me pongo a hablar de Alejandro Gaviria o de otras personas. Nunca he sido ni resentido, ni amargado, ni nostálgico, siempre he ido para adelante, entonces lo hice a un lado”.

Desde el 2022 es profesor en el Tecnológico de Monterrey, “esa para mí es la mejor Universidad privada de América Latina, allí soy profesor de liderazgo público, y me ha servido mucho para pensar y reflexionar sobre todo lo aprendido durante estos 25 años”.

Las redes sociales

Expresó que ahora está en paz y muy contento, “he descubierto muchas cosas y esta es una nueva página que empezó, y lo pongo en primera persona, cuando a comienzo de este año dije: para estar en la política, tengo que estar en el mundo de las redes sociales. Nunca las utilice, siempre lo hacía de manera obligada, pero no era una expresión natural; este año he aprendido a hablar el lenguaje de las diferentes redes sociales, y lo he aprendido, lo he disfrutado y he corroborado que en medio de toda esta gritería, porque yo siempre asociaba redes con polarización, insultos, maltrato de las personas, el que está allá y dice usted es un hijo de tantas y dice cualquier cosa y recibe likes porque insultó a otra persona”.

Dice que descubrió que sí se puede participar en las redes sociales, “se puede participar de una manera diferente, se puede hablar distinto; he aprendido a expresarme de maneras diferentes, a comunicar utilizando otros términos. Me ha gustado mucho, me ha dado una nueva energía, y estamos llegando a mucha gente”.

Actualmente se está acercando a personas con las que estuvo en alguna oportunidad y quedaron dolidas de lo que pasó en el 2022, frustradas y amargadas algunas, comenta. “Esa primera etapa es ir a acercarse, reencontrándonos y entonces no vengo como candidato presidencial, sino en ese proceso, por ejemplo estuve caminando en la Plaza de Bolívar de Manizales con la gente, sencillo, tranquilo y sin esa parafernalia de las campañas y del político. Estamos sintonizando y haciendo valer lo que hemos luchado todos estos años. Mire las encuestas, que reivindican una forma de la política, la transparencia, la consistencia, la coherencia, la capacidad de transformar, de mantenerse firme con unos principios, sin correr las líneas éticas”.

Recalca que no hay que rodearse de Benedettis para llegar a la Casa de Nariño, “hay que luchar contra esta corrupción tan horrible que estamos viendo con todo eso que está pasando”.

La oportunidad para El Centro

Está contento en medio de lo que ha visto en estos primeros recorridos por algunos sectores del país, y cree que llegó la oportunidad del Centro: “ahora, tenemos que mirar que se le llama Centro, que no está en un grupo o en el otro, entonces ¿ya se llama centro? Creo que es la oportunidad para una política diferente, y lo pongo en estos términos, unos términos fáciles de entender. Nosotros estamos en política, vamos por el poder. Yo estoy aquí por el poder, y nos metimos a la política para cambiar esta sociedad, por unos principios, por unos ideales, por una forma de hacerlo; esa es la perspectiva mía y de los que hemos estado en Compromiso Ciudadano, de los que hemos hecho política juntos. Siempre hemos jugado en la misma cancha, en la que estamos hoy atravesados.

Benedetti salió de la oficina de Petro y dijo, ahora yo voy a tener oficina aquí al lado, y voy a trabajar con el Congreso, y salió para hablar con el Congreso; esa cancha es la que no queremos, y nunca hemos querido. Yo puedo trabajar con todos los partidos porque hay gente valiosa en todas partes, pero en otra cancha, con otras reglas, que empiece a luchar contra esa corrupción tan tremenda. Ese todo vale con tal de ganar, ese cuento que dice que hay que tragarse unos sapos, que la política es dinámica, eso significa hacer trampas. En Colombia no existe quien haya hecho esas transformaciones, debe haber, pero en Colombia no, y lo vemos con Petro, iba a luchar contra la corrupción y nada, no lo hizo ni lo va a hacer, y lo describió su hijo Nicolás y lo dijo el mismo Benedetti en los videos y los audios, y lo estamos viendo”, comenta Fajardo.

Se preguntó, “entonces, ¿qué es el centro?, ¿Qué condiciones tenemos? Yo siempre he luchado por esta política independiente, alternativa, constructiva, decente, se puede ser decente. A mí me dicen tibio porque no insulto ni trato mal a los demás, porque no pego coscorrones, no pateo, no me burlo, no grito. Esa no es la Colombia que yo quiero, porque después de ver dos malas películas, la de Duque, muy mala película, y esta que estamos viendo, una mala película en vivo y en directo, tiene que venir una buena”.

Sin arrepentimientos

“Voté dos veces en blanco y me dijeron que era un tibio porque voté en blanco y no me he arrepentido un solo segundo; van dos veces y lo hice explicando por qué no, y para verdades el tiempo, tener paciencia, no enloquecerse, no ponerse rabioso, tener la consistencia, la coherencia; mantenerse en una línea de trabajo como me he mantenido yo”.

Considera que el próximo periodo presidencial va a ser el más difícil en la historia de Colombia, “va a ser una Colombia resentida, amargada, frustrada, desesperada por parte de algunos, con muchos sentimientos negativos entre nosotros, eso es muy difícil. Creo que tiene que ser un gobierno de unidad Nacional donde puede haber gente de derecha, de centro y de izquierda, y creo que hay gente valiosa y lo podemos hacer; pero para liderar eso se necesita unas condiciones muy especiales, uno saber gobernar, yo sé gobernar muy bien y lo digo con gusto y cuando digo es con toda la gente que trabajaba; y otra es que yo estoy en confrontación con personas. Yo digo que este es un mal gobierno, pero siempre he sido respetuoso de la otra persona. Siempre digo que podemos ser diferentes, sin ser enemigos, y me dicen tibio porque no salgo a insultar a la gente, o sea, tengo que salir a insultar a Petro y a la Cabal para que los demás queden contentos. Esa no es la Colombia que queremos«

Lo peor que ha pasado

Dice que hay varias cosas que han sucedido y que no está bien que eso pase, “una muy importante es la corrupción, estamos viendo en vivo y en directo la corrupción, estamos oyendo la descripción que pone en cuestión por ejemplo al ministro de Hacienda, esos testimonios son muy contundentes y estamos viendo de cuántos partidos están, cuántos han estado en ese mundo de la corrupción, aquí y allá por todos lados, qué horror, ¿esa es la Colombia que queremos? Pues yo no, y estoy seguro que la mayoría de la gente no, y no tiene que ser así; ese cuento que nos metieron de que así es la política, no es la política”.

Sobre la educación dice que lo del ICETEX es un ejemplo que muestra lo que hay detrás, “el daño que están haciendo para los jóvenes, ya se ha discutido muchísimo. Yo creo que está visto lo del ministro de Educación, la forma de actuar y de responder; daño, daño. Entonces, ¿quieren cambiar el mundo? legítimo, uno puede cambiar. Pero entonces destruye, pero no construye, entonces todo es culpa de Duque, y no hace porque no lo dejan, cómo le parece la maravilla, no, pues para el cielo va al hombre”.

¿Conocer las competencias

Para Sergio Fajardo, el objetivo en todo propósito de sacar adelante el país es incluir en cada paso proceso la lucha contra la corrupción y tener claras las competencias y el rol de cada actor en el gobierno:

Creo que en esa discusión de si el Estado se debe reducir, se tienen que redefinir las competencias, pero eso es lo más profundo y difícil del mundo, es que es muy fácil salir a decir que en seis meses revisamos cuáles son las competencias y las distribuimos. Yo he sido alcalde y gobernador y he manejado 125 municipios y he sido alcalde Medellín en un área metropolitana y he recorrido a Colombia a pie, he caminado por todos lados, o sea, yo conozco esto, lo digo con toda la seriedad. Yo estoy preparado para ser presidente, o sea, yo no estoy charlando aquí, ni vengo a mamar gallo, ni estoy buscando un trabajo, pero eso es muy serio, cómo se dividen las competencias entre los municipios, los municipios y departamentos, de mil ciento tres municipios, 960 son de categoría 6, es decir no tiene nada, cómo vamos a hacer para entregarle competencias, no tienen las personas para trabajar en la Administración, no tienen la formación, no sabemos cuáles son las competencias, cómo se dividen las de Educación, ¿cada cual haga lo que sea? cómo lo vamos a hacer; los que dicen eso y lo proponen, no tienen ni idea, pero dicen, hagámoslo a lo colombiano, tranquilo, haga eso en dos años, ya después veremos. A mí no me parece correcto, y yo voy por la descentralización, ningún antioqueño es centralista, ni uno. Yo no soy centralista, por supuesto que no, pero tengo la experiencia, los equipos humanos, las competencias y la lucha contra la corrupción, si no se pone en cada ley, en cada paso que damos, un artículo para luchar contra la corrupción, aquí hay un lío muy grande, y no estoy hablando ni siquiera cuánto es la transferencia, no lo he mencionado; esto hay que hacerlo, pero bien hecho, porque los que lo hacen ahora y lo proponen ahora, en dos años se desaparecen, esto es en serio”. Repitió que no está aquí para ir mamando gallo por Colombia.

La Ley de transferencias  

Está convencido que esa Ley traerá un gran lío al país, “si no se hace bien, es un daño muy grande para Colombia, muy grande, por supuesto que todos queremos más recursos, por supuesto nosotros aquí somos de regiones que queremos la descentralización, en general en Colombia en todas partes, o sea eso no hay que ser ni paisa ni nada, todo el mundo lo quiere, pero ojo como lo hacemos, es una oportunidad para hacer un buen cambio, pero el más profundo y el más difícil, a las patadas, en un gobierno que va a las patadas, con improvisación, con todo esto, qué horror”.

Propuestas claves

Entre sus propuestas para buscar una Colombia distinta, dice que el problema es que no se sabe que se va a recibir, “usted dice la salud, y cuál salud, ¿qué vamos a recibir?, no sé, solo sé que la están destruyendo y que están haciendo mucho daño en muchas partes, pero ¿qué nos entregan? Uno de los cambios tiene que ser la política con seriedad, este presidente habló y habló y habló y prometió 500.000 cupos de todo, yo en los debates lo enfrenté y le dije, es imposible Señor, y me decía a mí que soy matemático, que no sabía de matemáticas.  Hay que hacer un gran proyecto de educación para Colombia, lo que estamos viendo es una calamidad. Y cuando yo hablo de educación está articulado con la ciencia, con la tecnología, con la innovación, con emprendimiento y la cultura, eso es clave para nosotros, pero eso tiene que ir de la mano del desarrollo productivo en las regiones, y cuáles son los trabajos que vamos a tener acá; sabemos cómo va a ser la educación superior, la inteligencia artificial qué papel va a jugar para mejorar esta sociedad, nada, aquí hablando paja y estas peleas y el mundo a una velocidad, y nosotros aquí en esto, eso sería un gran proyecto. Lucha contra la corrupción, donde yo esté, ahí está y le digo otra, la seguridad. ¿Qué vamos a recibir con la paz total? Vamos a recibir, como vamos, una Colombia vuelta nada en muchos espacios, la expresión era maravillosa, vamos a hacer la paz, pero no con un grupo, con todos al tiempo, con todos los que están en la violencia y hacemos la paz; excelente, quién no quiere que se acabe todos los grupos, imposible, sabemos los que tenemos idea, el desorden que estamos viendo, disidencias de disidencias, cada uno en un pedacito, más confrontaciones, el narcotráfico aumenta por todas partes. Aquí ya no hay ninguna motivación política ideológica, sino bandas criminales por todos lados. Tenemos que recuperar esa seguridad, y empieza por tener el fortalecimiento de la fuerza pública; la lección está prendida, para construir la paz, se necesita una fuerza pública más fuerte que la que se necesita para la confrontación. Y la seguridad ciudadana que va de la mano, todo eso nos toca”.

Finalmente dijo que“yo he estado acá en más de una oportunidad, muchas personas me han apoyado de una manera u otra. Hemos pasado por múltiples circunstancias, pero la convicción, los principios, y el convencimiento de que esto se puede hacer diferente, es total. No nos dejemos meter ese cuento de que así es la política, porque mire lo que tenemos”.

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