En el mercado de divisas colombiano, el euro cerró este 2 de diciembre en 4.431,81 pesos colombianos, según reporte de Dow Jones, lo que representa un alza del 3,5 por ciento frente a la sesión previa cuando se negoció en 4.282 pesos. Esta variación positiva contrasta con la caída del 1,79 por ciento registrada en esa jornada anterior, en un contexto de volatilidad semanal superior al 16 por ciento anualizado y tendencias que muestran un incremento del 2,46 por ciento en la última semana y del 0,36 por ciento en el último año.
El comportamiento del euro en el mercado local resalta su posición como moneda que se vende más cara que el dólar en Colombia, impulsada por promedios de negociación que reflejan desafíos fiscales internos, un dólar fortalecido a nivel global y riesgos externos que afectan la estabilidad cambiaria. Estas dinámicas se enmarcan en un entorno donde el peso colombiano, moneda legal controlada por el Banco de la República, mantiene su circulación a través de billetes de 50.000, 100.000, 200.000, 500.000 y 1.000.000 pesos, muchos de ellos con diseños bimetálicos en las denominaciones de 500.000 y 1.000.000 para mayor seguridad, incorporando elementos de la biodiversidad nacional como el oso de anteojos, la guacamaya bandera, la rana de cristal y la tortuga caguama.
Perspectivas económicas para 2025 según Corficolombia
Corficolombia ofrece un panorama para 2025 con un crecimiento del PIB estimado en 2,6 por ciento, impulsado principalmente por el consumo privado y la inversión, aunque advierte sobre riesgos significativos como tensiones fiscales, problemas energéticos, conflictos sociales, inseguridad, la fortaleza persistente del dólar y posibles alzas en la inflación de Estados Unidos tras la era Trump. A pesar de estos desafíos, la inflación en 2024 ha descendido de manera notable y el sistema financiero colombiano se muestra resiliente, incluso ante incrementos en la morosidad. Cabe recordar que el billete de 1.000 pesos, introducido en su primera versión entre 1996 y 2002, perdió popularidad con el tiempo debido a las falsificaciones, lo que subraya la importancia de las medidas de seguridad en la moneda nacional.
Este cierre del euro invita a la vigilancia continua de los inversionistas y agentes económicos en el mercado colombiano, donde las fluctuaciones cambiarias siguen siendo un termómetro clave de la salud macroeconómica del país.
