El profesor e investigador de la Universidad de los Andes, Víctor Mijares, analizó en diálogo con Infobae Colombia que Colombia, bajo el gobierno del presidente Gustavo Petro, probablemente asumiría un rol diplomático en favor de Venezuela en caso de que Estados Unidos, liderado por Donald Trump, despliegue poderío militar contra el régimen de Nicolás Maduro. Esta hipótesis surge ante la posibilidad de una operación militar estadounidense en Venezuela a partir de agosto de 2025, enfocada en las costas venezolanas y el Caribe, en medio de tensiones crecientes tras el rechazo de Washington a la propuesta de Maduro de una transición de dos años con acceso preferencial a recursos petroleros.
La operación denominada “Lanza del Sur”, que incluye el portaaviones USS Gerald R. Ford y buques de guerra en el Caribe, ha involucrado a 12.000 militares y registrado 21 ataques contra embarcaciones de narcotráfico, destruyendo 22 lanchas y dejando más de 80 personas fallecidas. Mijares considera una ocupación terrestre para derrocar a Maduro como poco probable pero no imposible, limitada a espacios específicos del territorio venezolano, y enfatiza la opacidad operativa para preservar el factor sorpresa y flexibilidad política.
Incertidumbre en la postura de Petro
Respecto a la posición de Colombia, el experto destaca la imprevisibilidad de Petro, quien podría inclinarse por solidarizarse diplomáticamente con Venezuela debido a convicciones ideológicas, aunque recientes posturas contra el narcotráfico generan dudas. “Creo que cualquier forma de esto va a alentar obviamente al presidente Gustavo Petro a tomar partido diplomático, muy probablemente en favor de Venezuela, aunque últimamente estoy teniendo algunas dudas por algunas posiciones que ha venido tomando Petro, que pareciera más inclinado a demostrar que él es verdaderamente un presidente que lucha contra el narcotráfico, que mantiene cierta distancia frente al gobierno de Maduro”, afirmó Mijares.
“Petro es siempre un personaje muy difícil de leer porque tiene algunas convicciones ideológicas, pero también tiene mucho aprecio por su propia libertad y sus propios beneficios. Entonces, es difícil leerlo, pero mi apuesta sería a que, tendería a solidarizarse, al menos, diplomáticamente, con Venezuela”
Víctor Mijares, profesor e investigador de la Universidad de los Andes
Reposicionamiento de Estados Unidos en la región
Mijares observa que esta escalada militar busca reposicionar a Estados Unidos en las Américas, reconfigurando el balance de poder en el Caribe, con escasa participación de aliados clave de Venezuela como Rusia, China, Irán, Cuba o Nicaragua, que no han desplegado fuerzas ni asumido roles activos. En la región, Colombia se opone abiertamente, Brasil y México mantienen posiciones tímidas para evitar asociarse con Maduro, mientras Trinidad y Guyana apoyan visiblemente a Washington, dividiendo el escenario político latinoamericano.
“Lo que estamos viendo es precisamente un interés de los Estados Unidos de reposicionarse en las Américas. Vemos muy poca participación de aliados importantes de Venezuela como Rusia o China en este ámbito. También mucho silencio por parte de Irán. No ha habido ningún tipo de despliegue militar en la zona por parte de los aliados, tampoco por los aliados regionales como Cuba o Nicaragua”
Víctor Mijares, profesor e investigador de la Universidad de los Andes
El análisis de Mijares, respaldado por reportes de Infobae Colombia, The New York Times —basados en funcionarios anónimos— y Reuters, subraya la viabilidad técnica de una intervención limitada por la capacidad estadounidense, aunque todo permanece especulativo ante la dependencia de decisiones políticas imprevisibles.
“Yo creo que una ocupación parece poco probable, pero no imposible. Esto podría darse, si llega a darse, en espacios muy limitados del territorio. Pero, esto es simplemente especulativo. No sabemos exactamente cuáles pueden ser los planes que hay detrás de todo esto”
Víctor Mijares, profesor e investigador de la Universidad de los Andes

















