Sergio Fajardo, candidato presidencial, descartó de manera tajante cualquier posibilidad de alianza política con Abelardo de la Espriella, precandidato presidencial, durante una entrevista con La FM, justo después de la publicación de la encuesta Invamer que lo posiciona como uno de los principales contendientes en la carrera electoral. Fajardo enfatizó su rechazo debido a profundas diferencias ideológicas y antecedentes políticos, defendiendo así su independencia y coherencia con los principios que ha sostenido a lo largo de los años.
Esta declaración se da en un contexto de creciente polarización y hostilidad en la carrera presidencial colombiana, donde la posible inclusión de De la Espriella y Fajardo en una coalición generó un intenso debate interno entre precandidatos. La encuesta Invamer, la primera realizada bajo la nueva ley de encuestas que impone mayor rigor metodológico, resalta el avance sistemático de Fajardo, quien recibe estos resultados con tranquilidad y satisfacción por su trabajo disciplinado.
Fajardo reafirma su rechazo a coaliciones y mantiene línea independiente
Fajardo, único candidato que no se ha sumado a conversaciones sobre coaliciones o consultas, reiteró que no cambiará su posición, recordando que ya en diciembre había sido claro al respecto. Su estrategia de campaña se centra en visitas sistemáticas a regiones como Villavicencio, Florencia, Mocoa, Cartagena, Atlántico y Medellín, evitando insultos y confrontaciones directas para destacar por consistencia. En medio de tensiones políticas, como su confrontación con Iván Cepeda, del Pacto Histórico, y su historial de oposición a Gustavo Petro, por quien votó en blanco en elecciones pasadas, Fajardo subraya su trayectoria sin zigzags ni oportunismos.
«Yo nunca estaría con Abelardo de la Espriella».
Sergio Fajardo, candidato presidencial
«Esa posición no la he cambiado. He dicho en diciembre hablamos, y me he mantenido por una línea».
Sergio Fajardo, candidato presidencial
En la entrevista, Fajardo se describió como una figura rara en Colombia por su coherencia sostenida durante años, sin saltos laterales ni insultos para ganar titulares. «En Colombia es muy difícil encontrar personas, discúlpeme que, entre comillas, me alabe, que sean coherentes y consistentes, y son por años. Y he mantenido una línea, ni un salto pa’ un lado, para el otro, hable del uno, insulte al otro para destacarse», afirmó. Contento con la encuesta, agregó: «La recibo bien. Contento, tranquilo. Ustedes ya saben, he venido trabajando de manera sistemática, seria, con disciplina, con método. No insulto a nadie, nunca soy un titular de nadie, siempre por una misma línea». Esta postura fortalece su imagen en un escenario electoral marcado por la fragmentación y la búsqueda de alianzas.

















