Familia intenta subir nevera a bus público por puerta trasera en Barranquilla

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En Barranquilla, miembros de una familia protagonizaron una escena insólita al intentar subir una nevera gris por la puerta trasera de un bus del servicio público, un video que rápidamente se viralizó en redes sociales desatando una gran polémica entre los usuarios. El clip, grabado desde un vehículo particular cercano y compartido inicialmente por la cuenta @ojokilla en Instagram, muestra cómo varios integrantes de la familia empujaban con esfuerzo el electrodoméstico, pero finalmente desistieron al percatarse de que no cabía y para evitar daños en el vehículo de transporte.

La grabación, difundida por conductores y testigos que presenciaron el momento, capturó la determinación de la familia en su intento por llevar la nevera adentro del bus, aunque no se especifica si lograron su objetivo en última instancia ni las razones detrás de esta peculiar acción. Las redes sociales estallaron con reacciones que resaltaron la ingeniosidad típica de la costa Caribe y las situaciones singulares que caracterizan el día a día en Barranquilla, convirtiendo el episodio en tema de debate viral.

Reacciones divididas en plataformas digitales

La polémica se intensificó por lo inusual de la escena, con comentarios que oscilaban entre la diversión por el carácter distintivo de los barranquilleros y críticas sobre el uso adecuado del transporte público. Mientras algunos usuarios defendían la creatividad de la familia, otros cuestionaban la viabilidad de tales maniobras en buses urbanos, alimentando discusiones sobre las particularidades culturales y logísticas de la ciudad.

“Lo que va para dentro, va para dentro”

Ocupante del vehículo particular

“No juzguemos sin saber la razón. No sabemos si el señor es dueño del bus y estaría libre”

Joven en redes sociales

Este incidente, aunque no cuenta con cifras específicas ni fecha precisa, subraya las anécdotas cotidianas que capturan la esencia vibrante y a veces impredecible de Barranquilla, recordándonos cómo un simple video puede encender conversaciones sobre normas sociales y la proverbial picardía costeña en Colombia.

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