El Gobierno Nacional de Colombia decretó el salario mínimo mensual para 2026 en 1.750.905 pesos, acompañado de un auxilio de transporte de 249.095 pesos, lo que suma un ingreso total de exactamente 2.000.000 pesos a partir del próximo 1 de enero. Esta medida, adoptada tras el fracaso de las negociaciones en la mesa de concertación laboral debido a desacuerdos entre el Ejecutivo, los gremios empresariales y las centrales obreras, representa el mayor aumento nominal en más de dos décadas, con un incremento del 23 por ciento en el salario base respecto a los 1.423.500 pesos de 2025, un 24,55 por ciento en el auxilio de transporte y un 23,19 por ciento en el total conjunto.
Este ajuste supera ampliamente los incrementos recientes, como el 12,07 por ciento que llevó el salario a 1.300.000 pesos en 2024 o el 16 por ciento de 2023 que lo elevó a 1.160.000 pesos desde el millón de pesos de 2022. En términos históricos, es el mayor desde 1991, solo comparable al 27 por ciento de 1989, cuando el salario pasó de 25.637 a 32.560 pesos, en una época de altas inflaciones en los años ochenta y noventa que superaban el 20 por ciento anual. Según la Tasa Representativa del Mercado al 30 de diciembre de 2025, el salario mínimo equivale a 471,17 dólares sin auxilio y 539,52 dólares con él, en un contexto donde el DANE reportó en agosto de 2025 una fuerza laboral de 22,3 millones de personas, de las cuales el 45,7 por ciento gana menos de un salario mínimo y el 38,1 por ciento no supera los dos.
Evolución histórica y contexto gubernamental
La fijación del salario mínimo sigue el artículo 146 del Código Sustantivo del Trabajo, que considera el costo de vida, la capacidad de pago de los empleadores y la productividad. En los ochenta y noventa predominaron ajustes elevados por inflaciones galopantes, como el salto desde 4.500 pesos en 1980 hasta los niveles mencionados; desde el año 2000, los incrementos se estabilizaron entre el 3 y 8 por ciento anual. Bajo distintos gobiernos, el salario ha crecido de manera sostenida: de 203.826 pesos en 1998 con Pastrana a 309.000 en 2002; 515.000 en 2010 con Uribe; 781.242 en 2018 con Santos; 1.000.000 en 2022 con Duque; y aceleraciones notables en el actual mandato de Petro, con crecimientos por encima del 12 por ciento en los últimos años.
Impactos en empleo, empresas e inflación
Este decreto impacta directamente a la mayoría de la fuerza laboral colombiana, generando debates sobre su efecto en la generación de empleo, los costos para las empresas y la dinámica inflacionaria, proyectada en un 3 por ciento para 2026. En materia de productividad, el año 2023 registró un avance del 1,24 por ciento, mientras que en 2024 el aumento salarial superó la inflación en 5,2 puntos porcentuales, contrastando con la pérdida real del 13,12 por ciento en 2022 por el alza de precios. La medida busca equilibrar estos factores en un panorama económico donde cerca de la mitad de los trabajadores percibe ingresos mínimos, reavivando discusiones sobre equidad y sostenibilidad.
