El gobierno del presidente Gustavo Petro anunció el 25 de noviembre la extracción de piezas arqueológicas del galeón San José, hundido en 1708 frente a las costas de Cartagena a 612 metros de profundidad, una operación que ha desatado controversia por la supuesta falta de rigor técnico y los riesgos legales en medio de litigios internacionales. La directora del Instituto Colombiano de Antropología e Historia, Alhena Caicedo, junto con la Armada Nacional, la Dirección General Marítima y el Ministerio de Cultura, lideraron la segunda fase del proyecto Hacia el corazón del galeón San José, utilizando tecnología de la Armada para recuperar un cañón de bronce, fragmentos de cuerda, monedas, porcelanas y otros objetos destinados a investigación científica.
La iniciativa, con una inversión de 9.000 millones de pesos aportados por las entidades involucradas, busca analizar el estado de conservación de la madera y otros materiales para una futura exhibición, así como esclarecer las causas del hundimiento mediante la comparación de evidencia física con documentos históricos. Sin embargo, la maniobra ha generado cuestionamientos de figuras como el expresidente Juan Manuel Santos, el profesor Mario Omar Fernández de la Universidad de los Andes, el especialista en arqueología marítima Juan Guillermo Martín y el decano de patrimonio cultural de la Universidad Externado, José Socarrás, quienes advierten sobre improvisación, falta de transparencia y marginación de la academia.
Voces críticas cuestionan la necesidad y el procedimiento
El galeón San José, cuyo hallazgo fue revelado en 2015 durante el gobierno de Santos, se encuentra en el centro de disputas legales con la empresa Sea Search Armada, que desde 1982 reclama derechos en la Corte Permanente de Arbitraje y obtuvo medidas cautelares en 2023, así como con Maritime Archaeology Consultants Switzerland por su declaración como Bien de Interés Cultural. La extracción reciente plantea dudas sobre el cumplimiento de esas cautelares, con una demanda de SSA que ronda los 40 billones de pesos y posibles riesgos para Colombia en arbitrajes internacionales. Además, críticos señalan que ya se disponía de información suficiente sobre cerámicas, cañones y monedas, y advierten sobre la manipulación de objetos sin protocolos exhaustivos.
«Ya se contaba con buena información sobre la procedencia de las cerámicas y de los cañones, incluso de las monedas. Todo eso ya lo conocíamos»
Mario Omar Fernández, profesor Universidad de los Andes
Por su parte, José Socarrás defiende en parte la extracción al considerar que, en un proyecto de esta envergadura, resulta justificado recuperar objetos para evaluar su comportamiento real ante el oxígeno, un período crítico en las próximas semanas y meses que permitirá prever el destino de los materiales del galeón.
«En el marco de un proyecto de investigación de esta envergadura se justifica extraer objetos para entender cuál será su comportamiento en la realidad (…) Las próximas semanas y meses van a ser críticos para entender cómo se comportan estos materiales en contacto con el oxígeno y en esa perspectiva entender qué puede pasar con los materiales»
José Socarrás, decano patrimonio cultural Universidad Externado
Defensa oficial resalta validación científica internacional
Las entidades oficiales aseguran que la operación respeta protocolos de preservación y estándares científicos, con análisis para contrastar historia y evidencia física, avanzando en la hipótesis de un hundimiento por falla estructural en lugar de una explosión. Alhena Caicedo rebate las críticas académicas en disonancia, argumentando que no han revisado los artículos publicados en revistas internacionales de primer nivel ni participado en congresos donde expertos globales han validado los resultados y criterios del proyecto.
«Creo que esas voces académicas que están en disonancia no se han tomado la molestia de ver todos los artículos científicos que han sido publicados en revistas de primer nivel a nivel internacional, o que no han tenido la posibilidad de participar en los varios congresos internacionales y nacionales que se han dado en la especialidad de arqueología subacuática, donde han participado todos los investigadores que están dentro de este proyecto y donde, justamente, los expertos internacionales también han validado esos resultados y han dado también su opinión favorable a los criterios con los cuales venimos trabajando»
Alhena Caicedo, directora Icanh
Este episodio reaviva el debate sobre el manejo del tesoro del San José, un emblema del patrimonio colombiano envuelto en tensiones jurídicas y científicas, mientras el país evalúa los próximos pasos para su conservación y exhibición sin comprometer posiciones legales internacionales.

















