Desde Manizales para La Veintitrés, informamos que la concejala Heidy Sánchez, de la Unión Patriótica, respondió a la senadora María Fernanda Cabal por negar el exterminio de la Unión Patriótica, episodio que estalló tras la entrevista de Cabal con el periodista Daniel Pacheco, editor general de La Silla Vacía. Sánchez difundió un video en sus redes el 30 de octubre y citó casos relevantes, en medio de una discusión que ha invocado memoria histórica y derechos humanos en medio de un clima político áspero. La entrevista en cuestión se viralizó el 29 de octubre, y desde entonces ha generado un intenso escrutinio público en redes y medios.
El choque público entre una representante de la UP y una figura del Centro Democrático llega en un momento en que el país encara episodios históricos de violencia política, con las voces de observadores y defensores de la libertad de información pendientes de cómo se abordan estos temas. En su intervención, Sánchez acusó a Cabal de negacionismo y revictimización, y recordó que la memoria de las víctimas no es objeto de disputa. El relato de Sánchez se apoya en el marco histórico de las víctimas reconocidas por instituciones como la Corte Interamericana de Derechos Humanos y la Jurisdicción Especial para la Paz; recordó, además, que la CIDH reconoció más de 6.000 víctimas y la JEP reconoce más de 5.000 víctimas, cifras que sirven para contextualizar la gravedad de la memoria que se pretende preservar. En su crítica, Sánchez citó específicamente las declaraciones de Cabal en las que generó polémica y defendió la necesidad de reconocer, no negar, estos hechos históricos.
Memoria histórica y el tono del debate público
La conversación entre Cabal y Pacheco, que comenzó en el marco de una entrevista para La Silla Vacía, dejó abierto un precedente en cuanto al tono y la forma en que se discuten los hechos históricos sensibles. Según el propio periodista, la entrevista terminó en buenos términos, pero dejó un antecedente que podría influir en futuras coberturas y debates políticos. En el marco de estas reacciones, la Asociación Colombiana de Periodistas (ACP) y otros observadores expresaron preocupación por la libertad de información y el supuesto tono revictimizante en ciertas intervenciones públicas, señalando que el manejo de la memoria histórica debe hacerse con responsabilidad y respeto a las víctimas.
«Nuevamente, la señora María Cabal, como su partido político (Centro Democrático) lo ha hecho durante los últimos meses, vuelve a revictimizar a la Unión Patriótica» – Heidy Sánchez, Concejala de Bogotá, Unión Patriótica
Entre las declaraciones de Cabal también quedaron registradas frases como «es muy difícil conversar con personas con cemento en el cerebro, de verdad» y «no me diga jamás que el Estado aniquiló la Unión Patriótica», expresiones que Sánchez marcó como ejemplos de negacionismo. Adicionalmente, Sánchez señalaba que, mientras se discuten estas memorias, persisten las llamadas de atención sobre cómo se aborda la historia de la UP y la necesidad de respetar a las víctimas. El episodio, además, ha mostrado cómo la difusión de contenidos en redes sociales puede acelerar un debate que ya está en curso, y ha puesto sobre la mesa interrogantes sobre el equilibrio entre libertad de expresión y responsabilidad al tratar temas de memoria histórica.














 
															 
															 
															 
															 
															
