En el marco del 40º aniversario de la toma del Palacio de Justicia de 1985, Jorge Iván Ospina, exalcalde de Cali y actual embajador, ofreció una entrevista que fue publicada el 5 de noviembre de 2025 en El Tiempo, en la que niega categóricamente cualquier vínculo entre Iván Marino Ospina y la operación que dejó un saldo trágico y complejo. El dirigente sostuvo que es “una vil mentira” que su padre hubiese mediado con Pablo Escobar para financiar la toma y defendió la idea de que la historia debe entenderse dentro de sus complejidades sin atribuciones simplistas.
La conversación de Ospina también aborda otros aspectos de la época: recuerda que Iván Marino Ospina falleció el 28 de agosto de 1985, apenas semanas antes de que se desatara la acción del 6 y 7 de noviembre de ese año, lo que, en su visión, habría impedido cualquier gestión de armas, recursos o comunicaciones para la operación. A la vez, reconoce haberse mantenido conversaciones en 1982 y 1983 entre el M-19 y el Cartel de Medellín para la liberación de secuestrados, una línea que, sostiene, no debe confundirse con apoyo logístico a la toma.
La versión de Ospina y la revisión de los testimonios
La entrevista posiciona al alcance de testimonios de terceros como un elemento clave para entender el relato histórico. Ospina afirma que Iván Marino Ospina tenía una visión de la acción centrada en una dimensión más rural, una consolidación de una fuerza de ese perfil que, a su juicio, no debía hacerse con operativos de magnitud como el del Palacio de Justicia. Asegura que esa opinión fue comunicada a la dirigencia del M-19 y que, por esa razón, no se habría acercado a las lógicas de ese tipo de operaciones. En la lectura del exfuncionario, las declaraciones de Carlos Lehder, exmiembro del Cartel de Medellín, respaldan su tesis de que Pablo Escobar y el cartel no participaron en el desarrollo de lo que fue la tragedia del Palacio de Justicia, lo que, según él, desmiente versiones de alianza con Iván Marino Ospina.
«No puede ser cierto, es una vil mentira que Iván Marino Ospina haya mediado una relación con Pablo Escobar para financiar la toma del Palacio de Justicia» – Jorge Iván Ospina, exalcalde de Cali y actual embajador
Además, Ospina sostiene que, si bien Iván Marino Ospina conversó con Pablo Escobar durante aquellos años, esas conversaciones no habrían generado el respaldo logístico o financiero para la acción. El relato, que busca contrastar versiones, se apoya en la lectura de testimonios posteriores que apuntan a una distancia entre el M-19 y el narcotráfico cuando se discute la operación que marcó la historia reciente de Colombia. En este sentido, el exalcalde puntualiza que, aunque existieron intercambios de ideas en torno a la liberación de rehenes entre el M-19 y el Cartel de Medellín, esos contactos no deben interpretarse como una alianza para financiar o facilitar el asalto a la sede judicial.
«Por el contrario, Iván Marino pensaba que el tema era de una acción más rural, de una consolidación de una fuerza más rural y que por tanto no debería adelantarse ningún evento ni operativo de la magnitud, trascendencia o importancia como fue el del Palacio de Justicia. Era claramente crítico en relación a ese tipo de operativos y lo había hecho conocer al interior de la dirigencia del M-19» – Jorge Iván Ospina, exalcalde de Cali y actual embajador
«Efectivamente hoy se conoce por parte de un ex miembro del cartel de Medellín, Carlos Ledher, cuando él señala y documenta que Pablo Escobar y el cartel de Medellín no participaron con Iván Marino Ospina en el desarrollo de lo que fue el holocausto del Palacio de Justicia» – Jorge Iván Ospina, exalcalde de Cali y actual embajador
«No podría negar que Iván Marino Ospina conversó con Pablo Escobar durante esos años, porque efectivamente lo hizo» – Jorge Iván Ospina, exalcalde de Cali y actual embajador
Para La Veintitrés Manizales, la entrevista publicada por El Tiempo enmarca el debate sobre una memoria histórica compleja: se enfatiza que las afirmaciones de Iván Marino Ospina acerca de su propio papel en una posible mediación deben entenderse dentro de un contexto de tensiones y rivalidades de la década de 1980, donde el M-19 y el Cartel de Medellín eran actores potentes en escenas separadas pero a la vez entrelazadas por la dinámica de la violencia y la negociación. Este relato llega en plena etapa de conmemoración del aniversario número 40 de la toma del Palacio de Justicia, y busca aportar claridad ante rumores que, según el entrevistado, han perdido footing con el paso del tiempo, sin perder de vista a las víctimas y a las pérdidas humanas que dejó aquel episodio.
Entre los datos secundarios que rodean el hecho, se destaca que las conversaciones entre el M-19 y el Cartel de Medellín, según la revisión histórica, ocurrieron en 1982 y 1983 y se centraron en la liberación de rehenes, como la hija de Marta Nieves Ochoa y Elvencio Ruiz. Se subraya también que Iván Marino Ospina falleció antes de la toma y, por lo tanto, no habría podido gestionar armamento, recursos o comunicaciones para la acción. En este marco, las declaraciones de Carlos Lehder, que señalan la ausencia de participación de Escobar y su cartel en el desarrollo de lo ocurrido, se citan como elementos que alimentan la revisión de versiones y la necesidad de un análisis riguroso de la memoria histórica.
Este material, difundido por un medio de alcance nacional y recogido por nuestra redacción regional, se inscribe en un momento en el que las audiencias buscan respuestas sobre el complejo entramado de actores y motivaciones que definieron una de las páginas más oscuras de la historia reciente. La cobertura de La Veintitrés Manizales continúa abierta al seguimiento de este tema, atento a nuevas declaraciones y a cualquier hallazgo documental que aporte a la reconstrucción de un episodio que sigue generando debate entre historiadores, familiares de las víctimas y la sociedad en general.
