La Ley 2466 de 2025 entró en vigencia el 25 de junio de 2025 en Colombia y, según lo aprobado por el Congreso, modifica reglas laborales sustanciales: contratos a término fijo con una duración máxima, contratación por obra, la norma general de contrato indefinido, licencias remuneradas y un recargo dominical y festivo que se implementa de forma gradual hasta 2027. La reforma es de aplicación obligatoria para las empresas y su efecto ya se percibe en puntos operativos de inmediato, mientras otros artículos avanzan progresivamente, un marco que llega a Manizales de la mano de La Veintitrés Manizales para explicar sus alcances y su cumplimiento.
Entre los cambios relevantes, la normativa establece que los contratos a término fijo tendrán una duración máxima de cuatro años y deben formalizarse por escrito; si la empresa no justifica la terminación o la modalidad, la relación laboral pasa a indefinida automáticamente. El recargo dominical y festivo se fija en 80 por ciento para 2025, 90 por ciento para 2026 y 100 por ciento para 2027, mientras que la jornada semanal se reduce oficialmente a 42 horas cuando corresponde, lo que implica reorganizar turnos y cargas laborales. Se amplían las licencias remuneradas con nuevas facilidades para atención médica y para compromisos escolares de hijos menores; estas ausencias deben ser remuneradas y no pueden descontarse del salario, siempre que exista respaldo documental. Los contratos por obra o labor deben describir con detalle la labor; si no se especifica o se continúa tras la tarea, la relación se convertirá en indefinida con reconocimiento retroactivo. En materia de permisos y ausencias, se contemplan la asistencia médica durante la jornada, emergencias familiares, formación y capacitación profesional, trámites judiciales o administrativos y reuniones escolares de hijos menores, todas con remuneración y respaldo documental. El artículo 15 reconoce a los padres el derecho a ausentarse con remuneración para reuniones o actividades escolares, implementado como derecho obligatorio.
Impacto práctico para empleadores y trabajadores
La reforma busca aportar mayor claridad y formalización de las relaciones laborales, al tiempo que ofrece una protección reforzada para permisos remunerados y una reducción gradual de jornadas y recargos. Impone a las empresas la revisión de contratos, pólizas de licencia y estructuras de costos laborales, con posibles sanciones por incumplimientos del Ministerio de Trabajo. En Manizales, estos cambios exigen ajustes operativos y una revisión de políticas de personal, para garantizar que las nuevas exigencias se apliquen de forma razonable y sin afectar la continuidad de las operaciones.
Las autoridades señalan que la reforma busca mayor claridad y formalización de las relaciones laborales, con una protección reforzada para permisos remunerados y una reducción gradual de las jornadas y recargos.
En el ámbito de permisos y ausencias, la norma establece que asistir a citas médicas durante la jornada, atender emergencias familiares, participar en formación y trámites administrativos o judiciales y asistir a reuniones escolares de hijos menores deben ser remunerados y acompañados de respaldo documental. La implementación gradual busca evitar impactos operativos, por lo que se recomienda a empleadores y trabajadores acordar criterios razonables sobre la frecuencia y el uso de estos derechos. El marco también prevé sanciones por incumplimientos, a ser aplicadas por el Ministerio de Trabajo, con el fin de garantizar el cumplimiento efectivo de las nuevas obligaciones y derechos.
















