La ciudad de Bogotá, situada en la cordillera Oriental de Colombia, recibirá este 15 de noviembre un pronóstico meteorológico que avisa lluvia frecuente a lo largo del día y de la noche, con nubosidad elevada y temperaturas entre 11°C y 19°C. El informe conjunto de la Alcaldía de Bogotá y el IDEAM señala una probabilidad de lluvia del 85% durante el día y del 88% durante la noche, mientras la nubosidad alcanza el 95% en jornada diurna y 99% en nocturna. El índice ultravioleta se mantiene en nivel 6 y las ráfagas de viento podrían alcanzar hasta 18 km/h durante el día y 11 km/h por la noche, condiciones que recomiendan tomar precauciones en movilidad y actividades al aire libre.
El documento subraya que Bogotá está en la cordillera Oriental y que su clima es característicamente frío y seco, con una temperatura promedio reportada por el IDEAM de 13.1°C. En términos de variaciones típicas, el rango diurno suele situarse entre 18 y 20°C, y el nocturno entre 8 y 10°C; sin embargo, al inicio del año podrían registrarse temperaturas extremadamente bajas, incluso de hasta -5°C, siguiendo las tendencias de temperaturas extremas observadas en contextos de alta montaña. Este pronóstico, elaborado para la planificación de transporte, salud pública, prevención de desastres y otros sectores, se inscribe en un marco de la variabilidad climática de Colombia, donde las condiciones pueden variar entre tropicales, secas, templadas y frías de alta montaña, con múltiples subtipos.
Datos secundarios señalan que el clima de Bogotá tiende a mantener máximas diurnas entre 18 y 20°C y mínimas nocturnas entre 8 y 10°C, con temporadas lluviosas en marzo a junio y septiembre a diciembre, y periodos secos en enero y febrero, así como de julio a agosto. Estas dinámicas, influenciadas por las cordilleras y las costas, reafirman la necesidad de políticas públicas que fortalezcan la gestión de emergencias y la planificación de infraestructuras para afrontar condiciones variables a lo largo del año.
Implicaciones para la ciudad
Con condiciones de alta probabilidad de lluvia, nubosidad y temperaturas que exigen vestimenta de abrigo, se recomienda a residentes y visitantes planificar rutas de transporte con mayor tolerancia a retrasos y superficies mojadas, así como a las autoridades reforzar la vigilancia de drenajes y la atención de incidentes en zonas vulnerables. En salud pública, el informe sugiere monitorear enfermedades sensibles al clima y promover medidas preventivas para poblaciones vulnerables, mientras que el turismo y la actividad económica deben adaptarse a la variabilidad climática para optimizar itinerarios y servicios al aire libre.
«No hay citas textuales registradas en el material» – Equipo de Prensa IDEAM
La previsión meteorológica, elaborada para ser útil a múltiples sectores, subraya la utilidad de estas informaciones para la planificación de transporte, salud pública, prevención de desastres y turismo, y recuerda que la variabilidad climática exige actualización constante de alertas. Desde La Veintitrés Manizales seguiremos de cerca el desarrollo de este fenómeno y su impacto en la vida urbana de Bogotá, así como en las estrategias de cobertura para los lectores que viajan a la capital ocasionalmente o realizan negocios entre ciudades.

















