Con una inversión total de $1.730 millones, la Administración Municipal y el Comité de Cafeteros de Caldas finalizaron la quinta y última entrega del convenio dirigido a impulsar la productividad y el bienestar de las familias cafeteras de la ciudad.
La Alcaldía de Manizales y el Comité de Cafeteros de Caldas completaron la fase final de un convenio que, durante su ejecución, dejó avances significativos para la renovación, tecnificación y sostenibilidad de la caficultura local. La iniciativa contó con una inversión acumulada de $1.730 millones, destinados a fortalecer la producción y mejorar las condiciones de quienes dependen del café como sustento.
De acuerdo con los resultados presentados, uno de los principales logros fue la renovación de 2,7 millones de árboles mediante prácticas de zoca y siembra, además de la siembra de 231.000 nuevos árboles en fincas del municipio. A ello se sumó la entrega de cerca de $800 millones en fertilizantes, insumo clave para la recuperación de suelos y el incremento de la productividad.
El convenio también impulsó la ampliación de nuevas áreas en café, con el acompañamiento a 30 hectáreas y una inversión cercana a los $200 millones. En este proceso se entregaron 380.000 colinos para fortalecer la siembra y garantizar la continuidad de los cultivos.
En infraestructura, se otorgaron 41 incentivos para mejorar sistemas de secado, 20 para la construcción y optimización de procesadoras de pulpa, y 11 para la instalación de garruchas, herramientas que facilitan el transporte del grano en zonas de difícil acceso. Asimismo, se distribuyeron 30 tanques tipo tina y 80 aspersoras con batería para mejorar la eficiencia en labores agrícolas.
El componente social también tuvo un papel destacado con la entrega de 50 incentivos orientados a la seguridad alimentaria de las familias beneficiadas, una apuesta por mejorar las condiciones de vida de quienes trabajan en el sector rural.
La Alcaldía de Manizales y el Comité de Cafeteros destacaron que este convenio constituye un paso adicional para consolidar una caficultura más productiva, resiliente y sostenible. Esta alianza, señalaron, refleja el compromiso de la ciudad con su vocación agrícola y con las comunidades que mantienen viva la tradición del café.

















