Medellín: Gaviria y Uribe buscan alianza opositora contra Petro; Romero critica.

Compartir en redes sociales

En Medellín, donde César Gaviria Trujillo y Álvaro Uribe Vélez buscan delinear una amplia alianza de oposición a Gustavo Petro, el precandidato Camilo Romero criticó la reunión entre ambos, señalándolos como símbolos de lo que el país quiere dejar atrás y en un momento en el que se habla de una agenda para revitalizar la consulta de las colectividades históricas y figuras independientes.

Romero señaló que esa reunión anticipada y el afán de coordinar un bloque opositor pretenden frenar el avance del progresismo, recordando la cita celebrada el veintiséis de octubre y su interpretación como precedente. Según el precandidato, las fuerzas históricas que hoy buscan reorganizarse recurren a viejas dinámicas para contrarrestar lo que consideran un giro progresista en la administración de Gustavo Petro y en la propia configuración política del país.

Reacciones y posturas ante la reunión Gaviria-Uribe

Des plega una agenda para revitalizar la consulta de las colectividades históricas y las figuras independientes, un movimiento que, de acuerdo con Romero, apunta a reagrupar a sectores liberales y conservadores alrededor de una narrativa que intenta presentar al progresismo como un desví o una amenaza para la estabilidad. En este marco, la conversación entre Gaviria y Uribe se percibe como un intento de consolidar una coalición de oposición que se distancie del gobierno de Petro y se plantee como alternativa de poder de cara a las próximas elecciones.

«Son el símbolo de lo que el país quiere dejar atrás» – Camilo Romero, precandidato presidencial

«Ganó el progresismo y al viejo poder solo se le ocurre como respuesta una reunión de dos expresidentes que representan el pasado. Primero salen a decir falsamente que lo del domingo fue un “fracaso” y luego corren desesperados a cuadrar coaliciones porque saben que Colombia despertó. Ni ellos mismos se creen las mentiras» – Camilo Romero, precandidato presidencial

«Así actúa la vieja política colombiana, que ahora dice que Petro se debe ir porque se les cayó el cuento embustero de la reelección y porque ven que entre más atacan al progresismo, más se fortalece. Gaviria y Uribe son el símbolo de lo que el país quiere dejar atrás: gobiernos indolentes con la gente, retroceso en la garantía de derechos y lógica criminal dentro del Estado» – Camilo Romero, precandidato presidencial

«Siguen creyendo que el país es una finca de propiedad vitalicia. Serán nuevamente derrotados por su codicia y menosprecio al pueblo de Colombia. ¡Pa’lante!» – Camilo Romero, precandidato presidencial

«Las bases liberales no estamos de acuerdo con el acercamiento del Presidente César Gaviria con el uribismo. El verdadero liberalismo, el de las mujeres, las víctimas y los trabajadores, de los ambientalistas, no está representado en el uribismo, como no lo estuvo en 2018 con Duque y en 2022 con Fico» – Juan Carlos Losada, representante a la Cámara (Partido Liberal)

«No representamos lo mismo. El Partido Liberal ha sido el partido de los derechos de los trabajadores, ha sido el partido de los derechos de las mujeres, ha sido el partido de los derechos colectivos, del ambientalismo, todo lo contrario de lo que representan las fuerzas reaccionarias de Colombia» – Juan Carlos Losada, representante a la Cámara

En este contexto, los actores liberales y progresistas destacan distinguir entre las identidades del liberalismo y el uribismo, especialmente ante la evaluación de la legitimidad de resultados electorales recientes y la representatividad de las alianzas que se proponen frenar al gobierno progresista. Mientras Gaviria y Uribe buscan consolidar un bloque opositor en Medellín, Romero y Losada remarcan las diferencias ideológicas y estratégicas que hoy dividen a las fuerzas históricas.

Con todo, este episodio subraya la necesidad de entender el impacto de las alianzas históricas en el escenario actual y el modo en que podrían reconfigurar las coaliciones de oposición de cara a las próximas elecciones. El antecedente de la consulta del 26 de octubre y las reacciones públicas de figuras clave como Romero y Losada potencian un debate que podría definir la dinámica entre liberales, uribismo y progresismo en los meses venideros.

Sigue leyendo