En la noche del 10 de octubre de 2025, una mujer denunció haber sido drogada con escopolamina en el bar Casa Matilde, ubicado en la zona rosa de Bogotá, y haber perdido la conciencia junto a su acompañante, quien sería su mejor amigo y otros conocidos cuyas identidades no han sido divulgadas. Alrededor de las 10:30 p.m., ambos despertaron desorientados y sin sus pertenencias, descubriendo que habían sido despojados de dinero y objetos personales y que la conciencia regresó en distintos puntos de la ciudad. Este episodio se enmarca en una serie de reportes sobre robos asociados al uso de la sustancia en entornos nocturnos.
La denunciante explicó que la sustancia fue administrada en las bebidas y que no recuerda con precisión cómo abandonaron el bar ni si abordaron algún vehículo para salir de allí. También se mencionó que la novia del acompañante principal se retiró del lugar tras presentar malestar repentino. Entre los indicios descritos, la denunciante señaló haber despertado con uñas cortadas y rastros de sangre, lo que sugiere un posible forcejeo. En total, la experiencia dejó a ambos sin dinero ni objetos, y la recuperación de la conciencia se dio en paraderos o lugares distintos a lo largo de la ciudad, aumentando la preocupación por la seguridad nocturna en la zona.
Advertencia sobre la seguridad en la vida nocturna
Este hecho se inscribe en antecedentes de robos vinculados al uso de escopolamina en Bogotá, particularmente en bares de la zona rosa. En redes sociales circula el testimonio público de la denunciante, que refleja un incremento en la preocupación entre quienes frecuentan esa área. Frente a ello, expertos y habitantes recomiendan extremar las precauciones: no acudir solos a lugares nocturnos, compartir ubicaciones y, en la medida de lo posible, mantener a la vista a las personas de confianza durante la salida y el regreso. El parque cercano a la intersección de Salitre y Avenida Boyacá emerge como punto de reconocimiento en las rutas de quienes caminan por la zona y buscan recordar lugares de llegada segura tras la salida de los locales.
«La ciudad está supremamente peligrosa. Traten de no estar solos, de no coger carro solos o compartan siempre las ubicaciones» – Denunciante
«Cuando vuelvo en mí estoy en un parque, caminando rápido con mi amigo, pero robados» – Denunciante
«Lo material se recupera, la vida sigue y yo quedé un poco afectada emocionalmente, pero aquí vamos» – Denunciante
«Varios me han comentado que les ha pasado lo mismo, precisamente en Casa Matilde» – Denunciante
Este incidente ha provocado un debate público sobre la necesidad de reforzar controles y vigilancia en las inmediaciones de bares de la zona rosa, así como sobre la importancia de comunicar y compartir experiencias para prevenir que otros transeúntes sufran situaciones similares. En el plano práctico, la denuncia impulsa recomendaciones para no transitar solos durante la noche y evitar conductas de riesgo, con la ciudad como contexto de seguridad y con el parque de referencia como guía para reconocimiento y retorno a rutas seguras.
















