Desde La Veintitrés Manizales reporta que la crisis económica y administrativa que enfrenta Deportivo Pereira desde octubre de 2025 ha generado impagos a futbolistas, obligando a disputar partidos con una nómina juvenil y provocando críticas a Dimayor, así como consideraciones de intervención legal y financiera. En este contexto, Álvaro López, presidente del club desde 2010 como socio minoritario, y César Giraldo, abogado deportivo, destacan que la situación podría desembocar en cambios en la administración o incluso en una inyección de capital para garantizar la continuidad del proyecto. La situación, que también implica un mayor escrutinio de la gestión, ha colocado a Pereira en una encrucijada entre salvaguardar la viabilidad deportiva y cumplir con las obligaciones frente a la liga y a los jugadores, todo ello en el marco de que la institución es una Sociedad Anónima.
Desde octubre de 2025 se han encendido las alarmas y se ha planteado la posibilidad de que los jugadores presenten cartas de renuncia ante la falta de pagos y la imprevisibilidad de la situación. El 28 de octubre, la autoridad emitió un comunicado para evaluar medidas de intervención y supervisión por parte del Ministerio del Deporte, recordando que Deportivo Pereira es una Sociedad Anónima y que, como tal, debe respetar derechos y obligaciones de la empresa. Entre las cifras clave se destacan 60 días como plazo legal para retrasos y que la nómina sub-17 y sub-20 ha recibido 9 goles en 2 partidos, datos que evidencian la tensión deportiva y la vulnerabilidad del equipo. En lo legal y financiero, se contemplan posibles renuncias de jugadores y acciones legales en la jurisdicción laboral o deportiva, mientras que la conversación se abre a la posibilidad de una inyección de capital o de cambios de administradores para asegurar la continuidad y la gobernanza del club. El contexto institucional y legal deja claro que la intervención del Ministerio del Deporte es una posibilidad real ante una gestión que ha generado críticas y dudas sobre la sostenibilidad del proyecto deportivo.
Crisis en Pereira: intervención, gobernanza y el futuro del club
La discusión pública se enmarca en críticas a la Dimayor por una supuesta permisividad y en el debate sobre si corresponde una intervención estatal para asegurar la integridad de la competición y los derechos de los jugadores. El Ministerio del Deporte, con facultades para intervenir e inspeccionar clubes que operan como Sociedades Anónimas, podría tomar cartas en el asunto para corregir deficiencias en la gestión y en la regulación de los clubes. Álvaro López podría verse afectado por estas evaluaciones, y el Pereira podría afrontar cambios en la dirección para establecer un marco de mayor rigor normativo que resguarde el producto deportivo y la rentabilidad del negocio. En este marco, también se discuten implicaciones para los derechos de televisión y futuros contratos de derechos, buscando garantizar ingresos estables que sostengan la operación del club y el interés de la afición.
«se están repitiendo temas como el impago de futbolistas que no ayudan a la competencia y dejan muy mal parado a la institución y al FPC» — César Giraldo, abogado deportivo; «Ya pasado ese plazo, los jugadores pueden pasar su carta de renuncia y entablar las acciones legales para el caso, ya sea en la jurisdicción laboral o deportiva» — César Giraldo, abogado deportivo; «Es muy difícil que desaparezca, la solución es que haya una inyección de capital ya sea de nuevas personas que quieren comprar el equipo o un cambio de los administradores» — César Giraldo, abogado deportivo; «Eso pasa cuando en ese tipo de cargos llegan personas que no tienen el conocimiento de la industria y que llegan a este tipo de extremos con este tipo de clubes que no tienen la culpa por como muchos los manejan» — César Giraldo, abogado deportivo; «Por ley el Ministerio del Deporte, ejerciendo sus facultades, tiene todas las facultades de intervenir, siempre respetando que el Pereira a día de hoy es una Sociedad Anónima y como tal debe respetársele todos sus derechos como empresa privada» — César Giraldo, abogado deportivo; «La Dimayor ha sido muy permisiva con ellos y es hora que realmente este tipo de equipos se les ejerza más mano dura desde el mismo sistema para que realmente el producto mejore como pasa en ligas más desarrolladas» — César Giraldo, abogado deportivo
En definitiva, la crisis de Deportivo Pereira sitúa a la ciudad de Pereira y a la región ante una encrucijada entre la necesidad de proteger a los futbolistas, mantener la integridad de la competencia y garantizar la viabilidad de un club que, como alguna vez ha demostrado, forma parte de la identidad deportiva de la región. Los próximos pasos podrían incluir intervenciones estatales, cambios en la administración y la posibilidad de inyecciones de capital, con la expectativa de que un marco normativo más riguroso evite que casos similares se repitan y que el fútbol profesional en Colombia avance con mayor solidez, transparencia y responsabilidad.
















