El presidente Gustavo Petro respaldó un megaoperativo del Ejército Nacional para debilitar las finanzas del ELN, que está en desarrollo, y defendió que la persecución de las finanzas es más eficaz que recoger muertos. Las operaciones, coordinadas entre el Ejército, la Fiscalía General de la Nación y la Policía Nacional, se despliegan en varias regiones del país, con presencia en Arauca, Amazonas, Norte de Santander y Bogotá, donde ya se reportan capturas de testaferros vinculados a la gestión financiera del ELN.
La iniciativa, descrita por Caracol Radio como una de las operaciones más grandes de los últimos años, busca despojar a la organización de sus recursos y cortar las rutas de financiación que sostienen su actividad. El plan implica un intenso trabajo interinstitucional, con detenciones y diligencias orientadas a testaferros que operaban las finanzas del grupo armado, y su desarrollo se mantiene activo a la hora de la publicación.
La persecución de la financiación, eje estratégico del operativo
El operativo refuerza la idea de que la lucha contra las finanzas de actores armados es clave para debilitar su capacidad operativa, y subraya la intención gubernamental de atacar redes financieras para debilitar la estructura del ELN a nivel nacional e internacional. La cooperación entre instituciones ha permitido avanzar en la identificación de testaferros vinculados a la gestión de recursos del ELN, con la expectativa de reportar nuevas capturas y desincentivar rutas de financiamiento.
«Mi orden ha sido que la persecución de las finanzas de los grupos armados nacional e internacionalmente es más eficaz que recoger muertos. Aquí demostraremos como la inteligencia es superior al misil» – Gustavo Petro, Presidente de Colombia
«un criminal, una mala persona, y ha dañado a su país muy malamente» – Donald Trump, Presidente de Estados Unidos
Antecedentes y contexto: este episodio se produce en medio de un cruce de declaraciones entre Petro y Trump en redes y medios, con el propio Petro impulsando un giro estratégico hacia operaciones masivas centradas en las finanzas de ELN. El efecto esperado es un debilitamiento de la estructura de financiamiento del grupo, con posibles capturas de testaferros y el escalamiento de la lucha contra las finanzas de grupos armados. Las fuentes señalan que las operaciones se habrían alistado en Arauca, Amazonas, Norte de Santander y Bogotá, y que ya hay reportes de detenciones que fortalecen la narrativa de la estrategia de presión financiera.