El presidente de Colombia, Gustavo Petro, generó controversia en la red social X al cuestionar si el país quiere replicar la situación económica de Argentina, donde el salario mínimo mensual se ha convertido en el más bajo de América Latina con apenas 225 dólares, según un informe del Centro Estratégico Latinoamericano de Geopolítica (Celag) destacado por el medio Página 12. Petro reaccionó con un directo “¿Quieren esto?” ante las políticas implementadas por el gobierno de Javier Milei, que utiliza los ingresos de los trabajadores como ancla para combatir la inflación, dejando el salario argentino por debajo incluso de los niveles de 2001.
En comparación, otros países de la región muestran cifras superiores: El Salvador con 273 dólares, Brasil con 288, Perú con 335, Panamá con 341 y Honduras con 343 dólares mensuales, mientras que Colombia mantiene un salario mínimo de 383 dólares equivalentes. Para 2025, en territorio nacional se estableció en 1.423.500 pesos más 200.000 pesos de auxilio de transporte, lo que representa un incremento del 9,54 por ciento. Ahora, de cara a 2026, el gobierno propone un alza del 11 por ciento hasta los 1.800.000 pesos, según mencionó el ministro del Interior Armando Benedetti, aunque las centrales obreras demandan un 10 por ciento que lo llevaría a 1.565.850 pesos, en medio de un debate polarizado con el empresariado.
Voces divididas en el debate salarial
El precandidato presidencial colombiano Camilo Romero, exembajador en Argentina, aprovechó el informe para advertir sobre el referente de la derecha colombiana, afirmando que es lo que proponen al país y que no lo permitirán. Por su parte, Manuel Adorni, portavoz presidencial argentino, defendió la postura de Milei al declarar que conceptualmente tener un salario mínimo es un error, ya que impide contratar a quienes aceptarían menos para ajustarse a la realidad económica. En Colombia, Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, criticó las propuestas de dos dígitos por parte del gobierno y las centrales obreras, argumentando que duplicar la inflación escalaría precios y servicios sin límite, impactando costos laborales, despidos, alzas en precios y tasas de interés del Banco de la República.
“¿Quieren esto?”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
“Conceptualmente, tener un salario mínimo es un error. Si hay personas que están dispuestas a trabajar por menos de ese salario, el esquema no te permite contratarlo porque efectivamente no le podrías pagar menos del SMVM”
Manuel Adorni, portavoz presidencial de Argentina
“Vean ustedes en acción al referente de la derecha Colombiana. Y es lo que le proponen a nuestro país. ¡No lo vamos a permitir!”
Camilo Romero, precandidato presidencial colombiano y exembajador en Argentina
“Pensar en un salario mínimo de dos dígitos que duplique la inflación en Colombia, obviamente nos lleva a una escalada de precios y servicios que no tiene límite en Colombia. Creemos que es una gravísima equivocación por parte de las centrales obreras y el Gobierno pensar en dos dígitos”
Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco
Estas reacciones de la izquierda colombiana posicionan las políticas de Milei como una advertencia clara de cara a las elecciones de 2026, en un contexto donde el informe de Celag, disponible en la cuenta @CELAGeopolitica y las publicaciones de Petro en @petrogustavo, avivan el pulso sobre el futuro del salario mínimo en la región.

















