El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se refirió este 23 de diciembre en una alocución presidencial al aumento del salario mínimo para 2026, que por primera vez se determinará a partir de la canasta mínima vital y el salario vital familiar, conceptos consagrados en la Constitución y respaldados por la Organización Internacional del Trabajo. Insistió en que este indicador ha subido durante su gobierno y que continuará elevándose en mayor medida, aunque no anunció una cifra concreta, con el objetivo de garantizar condiciones de vida adecuadas para los trabajadores y preservar su poder adquisitivo frente a la inflación.
Durante su intervención, Petro destacó los avances en materia salarial bajo su administración, con tres incrementos consecutivos: un 16% en 2023, cuando el salario mínimo pasó a 1.160.000 pesos; un 12,07% en 2024, alcanzando los 1.300.000 pesos; y un 9,54% para 2025, fijado en 1.423.500 pesos sin incluir el auxilio de transporte. Estos ajustes han generado un aumento real del salario mínimo del 17,7% entre 2023 y 2025, cifra que cuadruplica el 4,7% registrado entre 2015 y 2018, y contrasta con la disminución real del 1,4% observada durante el gobierno de Iván Duque entre 2019 y 2022, partiendo de los 1.000.000 pesos en 2022.
Comparaciones históricas y proyecciones económicas
El mandatario enfatizó que estos incrementos responden a compromisos con la OIT, la Constitución y la ley, priorizando los intereses de los trabajadores en las negociaciones. En el contexto económico proyectado para 2025, con una inflación del 5,2% según el Banco de la República y el Dane, y una productividad de la economía del 0,91% también por el Dane, el déficit fiscal se estima entre el 6,2% y el 7,1% del PIB. Estas medidas beneficiarán directamente a 2,2 millones de trabajadores, aunque el Banco de la República ha advertido sobre los riesgos de aumentos excesivos, que podrían impactar la inflación, el desempleo y la informalidad laboral.
“Salario vital, ese concepto lo ponemos en el decreto, es lo que buscamos”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
Petro también aludió a un estudio de la Universidad Nacional que analiza el salario real desde perspectivas como el mark-up empresarial y teorías keynesianas-monetarias, subrayando que el salario nominal no puede ser el factor determinante del salario, sino que debe basarse en la capacidad de cubrir necesidades básicas. En este marco, el presidente celebró el cambio como una redistribución de riqueza hacia el pueblo trabajador.
“Ha subido y va a subir más”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
“este es el cambio y quiere decir que hay más riqueza para el pueblo trabajador de Colombia porque ese 17,7% también es cerca de cuatro veces lo que subió entre 2015 y 2018 cuando tuvo un aumento de 4,7%”
Gustavo Petro, presidente de Colombia
Esta declaración se enmarca en el cierre de año y anticipa debates para 2026, donde el nuevo enfoque en la canasta mínima vital podría marcar un hito en la política laboral colombiana, equilibrando recuperación económica postpandemia con demandas sociales históricas.

















