Ponce en México, 2 orejas y adiós a los toros, un espontáneo colombiano en la despedida del español 

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Fotos ntrtoros

El espontáneo, novillero manizaleño, recibió el beneplácito de Ponce, despidiéndole con un abrazo, llevaba en su camisa una inscripción que decía: “Quiero ser Torero y en Colombia me lo quieren prohibir”.

El portal suracapulco.mx publicó así lo que fue la última actuación del Maestro Enrique Ponce en la Monumental Plaza de Toros de México, en su presentación No. 50, para decirle definitivamente adiós a los toros la noche del miércoles en la capital azteca

 Al son de El Rey de José Alfredo Jiménez, interpretado por Pepe Aguilar, y en el ruedo de la plaza México, Enrique Ponce dijo adiós a su brillante e histórica trayectoria, saliendo en hombros con quién fue el rey de la corrida, Diego Silveti, que había cortado dos orejas en el primero de su lote uno de los dos únicos todos buenos del deslucido encierro de Los Encinos.

Apoteósica y emocionante fue ver a la plaza México de pie, iluminada por los celulares interpretando la famosa canción del compositor guanajuatense y aplaudiendo el grito de “¡torero torero! la salida de ambos triunfadores.

Vestido de blanco y plata con cabos negros, bajo una lluvia de confeti que dejaron caer los aficionados en la puerta de cuadrillas, apareció en su 50ª actuación el maestro Enrique Ponce, la figura que Toreo por última vez en su vida.

Fue un medio paseíllo el que hizo, porque una gigantesca bandera de México y el redoble de los tambores de una banda de la Policía Bancaria e Industrial rindieron honores con motivo del aniversario 108 de la Promulgación de la Constitución.

Foto Plaza Mexico

Y después otra vez el inconfundible “¡olé!” de la México para que el propio Ponce y sus alternantes, también de blanco su último ahijado, Alejandro Danny, y de obispo y oro, el segundo a quien le confirmo alternativa, Diego Silveti, continuaran el suspendido homenaje.

El último de su vida

Indiano, número 29 con 505 kg que ahora sí se convirtió al ser de regalo, en el último toro en la vida de Ponce quien lanceó bellamente y después se fue a los medios otra vez a brindar al público la plaza se puso en pie.

Un espontáneo, muleta en mano, se tiró al ruedo y ante el asombro de todos le pegó algunos muletazos al Estado.

El mismo Ponce lo rescató y calmó los ánimos para después hacer una faena consista con detalles artísticos muy suyos llenos de sentimiento y arte, rubricados, con ¾ de estocada y la concesión de las dos orejas.

El espontáneo

Un novillero manizaleño, Maikol Ramírez, fue el protagonista del hecho histórico ocurrido en la Plaza México cuando se toreaba el último toro en la vida artística de Enrique Ponce. El novillero de la tierra se lanzó al ruedo con su muleta y le ejecutó tres naturales de torero grande, para luego abrazarse con Ponce y dejar el mensaje, en la Plaza de Toros más grande del mundo, que en Colombia le quieren quitar las oportunidades a quienes como él, aspiran a ser figuras del toreo.  El Portal Taurino, Tauro Joven Manizales, escribió… “En la plaza de los “ole” más largos del mundo, se ha tirado un espontáneo de Manizales. “El cordobés” alumno de la Tauro Escuela ha hecho sentir su voz de protesta en la despedida de la leyenda del toreo Enrique Ponce”.   

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