Positivo balance de la Feria del Libro en Manizales 

Compartir en redes sociales

Más de 16 mil asistentes tuvo la Feria durante la semana de exhibición en el Centro Cultural Rogelio Salmona de la Universidad de Caldas, que contó con la participación de casi un centenar de autores nacionales e internacionales.

Para Darío Arenas, Vicerrector de Proyección Universitaria, esta fue una Feria abierta, diversa, plural y equitativa, “contamos con una representación muy importante de mujeres de diferentes partes del país y el mundo, además de una amplia variedad de temáticas. Este evento contribuyó a que la ciudad no sea la misma después de una semana de conversaciones, presentaciones de libros, discusiones y debates”.

La semana estuvo dedicada a rendir homenaje a un clásico de la literatura colombiana: La Vorágine de José Eustasio Rivera. Este libro, que celebra su centenario, será fue el eje central de la Feria del Libro Ciudad de Manizales en su 15ª versión. 

Entre los invitados especiales estuvo el Embajador de la Unión Europea en Colombia, Gilles Bertrand, expresó su gratitud por la invitación y destacó la importancia de la Feria del Libro Ciudad de Manizales. La catalogó como una plataforma fundamental para la construcción de tejido social a través de la cultura. 

Entre muchos invitados estuvieron el escritor colombiano William Ospina quien hizo presentación de su libro Pondré mi oído en la piedra hasta que hable, al igual que el Embajador de Palestina en Colombia, Raouff Almallqi, quien expuso la crítica situación que enfrenta su país, con la conferencia “Gaza, genocidio y resistencia”. Por su parte Marco Antonio Sosa, librero y editor del proyecto La Valija de Fuego de Bogotá, participó en la Feria con una interesante charla sobre su colección de libro álbum Pequeños Lectores. El espacio también incluyó a Mikaelah Drullard, escritora dominicomexicana, quien presentó su obra “El feminismo, ya fue” y compartió su perspectiva sobre la importancia de la inclusión en espacios culturales.

El misterio verde: las letras que nos habitan 

En conmemoración del centenario de La vorágine, se inaugura la exposición El Misterio Verde, que estará abierta al público durante los próximos dos meses. Esta muestra parte del archivo de la Universidad de Caldas, reúne documentos, objetos y elementos de gran valor relacionados con la última etapa de José Eustasio Rivera en Nueva York, rescatados especialmente para esta celebración. 

Los jóvenes, el barrio y las voces fueron protagonistas

Durante la semana, el Centro Cultural Rogelio Salmona fue el epicentro de un espacio literario donde convergieron los protagonistas, los autores y los libros. Sin embargo, en esta edición, lo más notable fueron los lectores y los nuevos rostros que frecuentan estos espacios y las voces disidentes. Por esta razón, la Universidad de Caldas le apostó por invitar a escritores que captaran la atención de los más jóvenes y por crear oportunidades especialmente diseñadas para esta audiencia. 

Durante la semana, las mañanas se dedicaron a actividades académicas con la participación de instituciones de educación básica y media, que disfrutaron de talleres, conversatorios y momentos especialmente diseñados para ellos. 

Librerías y emprendedores

Fue excelente la acogida para editoriales, autores y librerías, que resaltaron la participación activa de la comunidad lectora. Un ejemplo relevante fue el de la librería Leo Libros, cuyo representante, Cristián David Orozco, hijo de Leonel Orozco, destacó el carácter especial de esta edición: “Este año tuvo un sentido especial por la ausencia de mi padre, pero la acogida fue muy grata para nosotros“. 

El ingenio de los emprendedores fue clave para atraer a los visitantes a los stands de la Feria. Un caso de éxito fue el de Dato Literario, que llamó la atención del público mediante la ingeniosa idea de realizar intercambios de libros. Laura Martínez, representante del proyecto, comentó: “Estamos muy felices por la gran cantidad de actividades que la Feria del Libro de Manizales ofreció, desde presentaciones de libros hasta homenajes. En Dato Literario tuvimos un stand donde realizamos intercambio de libros completamente gratuito. La única regla era traer otro libro, y los visitantes se encontraron con una gran variedad de títulos, desde libros de tapa dura y nuevos, hasta libros usados. Lo más importante fue que creamos un espacio para que las personas pudieran venir y encontrarse con diferentes lecturas“.

Dolores Reyes y su obra

Entre los eventos destacados estuvo la presentación de la escritora argentina Dolores Reyes, quien vino a compartir su más reciente obra, Miseria, con los manizaleños. Reyes también participó en el conversatorio “Voces de mujeres: historias de la violencia”, junto a la autora colombiana Lorena Salazar Masso, lo que generó un espacio para la reflexión. 

En su paso por el Centro Cultural Rogelio Salmona, la escritora Dolores Reyes resaltó la calidez humana de los manizaleños. “Lo que más me gustó de estar aquí es la calidad de la gente. Todos, desde el primero hasta el último, son superagradables y atentos. La hospitalidad que se siente acá no se encuentra en todos lados“, expresó. 

Al referirse a su encuentro con los lectores, Reyes comentó: “Me sentí muy a gusto al escuchar sus experiencias. Muchos me contaron que leyeron mi libro hace uno o dos años, algunos en la universidad, y ahora compraron mi nueva novela. A veces uno piensa: ‘Nunca estuve aquí, nadie me conoce’. Pero llegas y te sorprendes al ver el impacto que tu trabajo ha tenido“. 

Leer es bienestar

Una de las actividades que más se llamó la atención al final del evento, es el relacionado con la campaña denominada ´Leer es bienestar`, actividad que realizó la Universidad de Caldas, al entregar un bono de $ 100.000 a 452 estudiantes, quienes pudieron con el mismo, reclamar uno o dos libros en cualquiera de los sitios que quisieran adquirirlos para que durante un mes los leyeran y posteriormente los hicieran llegar al sistema de bibliotecas de la Universidad, con el único objetivo que otros estudiantes también puedan acceder a ellos, según lo explicó Enrique Jaramillo, coordinador del Centro de Prácticas para la Paz de Bienestar Universitario.

Esta iniciativa busca cerrar algunas brechas, porque sabemos que muchos de nuestros estudiantes no tienen los recursos suficientes para adquirir los libros que desean leer. Como institución, hacemos un esfuerzo por crear esta campaña en este momento”, comentó. 

Con esta no solo genera un impacto en la comunidad universitaria, sino que se busca fortalecer los lazos con los comerciantes de libros de Manizales, por medio del beneficio económico, ya que la Universidad adquiere los libros directamente de los libreros locales. 

Ana Muñoz, de Ágora Café del Libro, expresó su satisfacción con la campaña: “Me parece muy importante este tipo de procesos, además de que es la primera vez que piensan en un ganar-ganar para todos. Es excelente que les den a los estudiantes la oportunidad de elegir lo que quieren leer y que la Universidad compre directamente a los libreros. Antes adquirían los libros de las editoriales más grandes del país, y este año fuimos favorecidos con esta campaña, lo cual es muy importante para nosotros”. 

Sigue leyendo