Prosperidad Social anunció la extensión del plazo hasta el 12 de enero de 2026 para que 27.101 beneficiarios del programa Renta Joven reclamen sus transferencias monetarias en modalidad de giro, una medida que beneficia a jóvenes estudiantes en situación de pobreza y vulnerabilidad. Los giros, por un valor total de 82.300 millones de pesos, comenzaron a entregarse desde el 23 de diciembre pasado, como parte de un proceso iniciado el 17 de diciembre de 2025, y están disponibles en los puntos autorizados del Banco Agrario de Colombia. Esta ampliación busca facilitar el acceso a aquellos participantes que no cuentan con una cuenta de ahorros o producto financiero activo, permitiendo el retiro directo en las oficinas del banco tras una consulta previa en el sitio web https://consultagiros.bancoagrario.gov.co/ConsultaPagos/Consulta.aspx.
El programa Renta Joven otorga transferencias monetarias condicionadas, reguladas por la Resolución 00137 de 2024, con incentivos específicos según el desempeño académico de los beneficiarios. Por matrícula e inscripción activa, así como por permanencia con un promedio igual o superior a 3,0, se entregan 400.000 pesos por período académico, hasta dos veces al año. Adicionalmente, por excelencia académica con promedio igual o superior a 4,0, se suman 200.000 pesos por el mismo período. Para estudiantes del Sena en formación técnica o tecnológica, el apoyo consiste en 200.000 pesos mensuales durante seis ciclos bimestrales al año. A partir de 2025, los pagos se implementarán mediante el Sistema Integrado de Información Financiera (Siif) desde el primer semestre, promoviendo una mayor digitalización.
Quiénes pueden acceder y cómo hacerlo
Los giros aplican a estudiantes de educación superior pública, alianzas interinstitucionales, el Sena y Escuelas Normales Superiores en grados 12 o 13, siempre que cumplan con los criterios de matrícula, permanencia y excelencia. Prosperidad Social invita a los beneficiarios a descargar la aplicación Bico del Banco Agrario para agilizar pagos digitales en el futuro, con el objetivo de simplificar la gestión financiera y reducir los riesgos asociados al manejo de efectivo.
Esta extensión del plazo representa un esfuerzo adicional por parte de Prosperidad Social para garantizar que ningún joven estudiante se quede sin su apoyo económico, fortaleciendo así su permanencia en la educación superior en medio de condiciones de vulnerabilidad.

















