Un sismo de magnitud 3.8 se registró este 31 de octubre en Salgar, Antioquia, según el Servicio Geológico Colombiano, a una profundidad de 155 kilómetros y con coordenadas 5.944358349, -76.0500412; la información es preliminar.
El temblor ocurrió a las 04:23 hora local y, por su profundidad, se espera que su impacto en la superficie sea moderado o apenas perceptible en algunas zonas. En Colombia se utiliza la EMS-98 para medir la intensidad, una escala que va desde 2, que significa apenas sentido, hasta más de 7, que indica daño severo, y en este caso la información disponible no denuncia daños confirmados. El Servicio Geológico Colombiano mantiene la vigilancia y aclara que los datos pueden variar conforme avancen los análisis técnicos. Este fenómeno se inscribe en un país ubicado en el Anillo de Fuego del Pacífico, una región de alta actividad sísmica y volcánica que explica la frecuencia de temblores, incluso a cierta distancia de la costa.
Contexto sísmico y antecedentes históricos
Colombia es uno de los países con mayor actividad sísmica del mundo y se estima que alrededor del 80% de los temblores más intensos se observa en la región que rodea al territorio. La nación se halla en el corazón del Anillo de Fuego del Pacífico, lo que la sitúa en una zona de alta actividad sísmica y volcánica. Las zonas con mayor actividad incluyen Nariño, Chocó, Caldas y Santander, donde sobresale Los Santos como una de las áreas más sísmicamente activas. A lo largo de la historia, varios sismos han dejado una huella profunda: el sismo de Ecuador-Colombia de 1868, con magnitudes entre 6.3 y 6.7, dejó mortalidad cercana a 70 mil víctimas; el Terremoto de Cúcuta de 1875, conocido también como Terremotos de los Andes, habría oscilado entre 7.5 y 8.5 de magnitud y dejó 461 cuerpos en Colombia, con afectación que se extendió a Táchira, en Venezuela, y se mencionan aguas termales asociadas; el sismo y tsunami de Esmeraldas de 1906 alcanzó magnitud 8.8 y dejó unas 1.500 víctimas, con olas de hasta cinco metros que golpearon Tumaco; Páez en 1994 reportó una magnitud de 6.4 con alrededor de 800 muertos; y el Eje Cafetero de 1999, con magnitud 6.2, causó más de 1.000 muertos, unos 4.000 heridos, aproximadamente 8.000 fincas cafeteras destruidas y unas 13.000 estructuras afectadas.
No se reportan declaraciones textuales oficiales hasta el momento.
Con este nuevo temblor, las autoridades enfatizan la necesidad de mantener la vigilancia ante la marcada actividad sísmica de la región y de seguir las recomendaciones de seguridad ante temblores, especialmente en zonas de alta exposición y en comunidades agrícolas de la región cafetera, donde las repercusiones estructurales pueden variar según la intensidad que se registre en la superficie.














 
															 
															 
															 
															 
															

