En la madrugada del martes 25 de noviembre, hombres armados irrumpieron en la vivienda de la docente Janeth Rocío Osorio, tutora del programa de tutorías para el Aprendizaje y la Formación Integral en la Institución Etnoeducativa Isidro Ibarra Fernández de Uribia, La Guajira, y la secuestraron violentamente obligándola a abordar su propio vehículo antes de huir con ella. Este hecho conmocionó a la región, dejando en vilo a su familia, colegas y la comunidad educativa.
El secuestro se produce menos de 24 horas después de la liberación de Felipe Soto Morales, quien había sido secuestrado el viernes anterior y recuperó su libertad la noche del lunes. Ante esta situación, el Grupo Gaula Militar asumió las investigaciones con el objetivo de lograr el rescate de la educadora, mientras que familiares, colegas y diversas organizaciones han elevado un clamor unificado solicitando respeto absoluto a su vida y dignidad.
Rechazo unánime de autoridades educativas
El Ministerio de Educación rechazó de manera categórica el secuestro, calificándolo como una grave vulneración a los derechos fundamentales y un ataque directo contra la educación, la institucionalidad y el tejido social de La Guajira. La cartera exigió la liberación inmediata e íntegra de Osorio y pidió a la Fiscalía, la Policía y demás entidades desplegar todos los recursos necesarios para la captura de los responsables. Asimismo, la Secretaría de Educación Departamental de La Guajira expresó su rechazo total y profunda preocupación por la seguridad de los educadores en la zona.
«una grave vulneración a los derechos fundamentales” y un “ataque directo en contra la educación, la institucionalidad y el tejido social de La Guajira”
Ministerio de Educación
“la labor docente es fundamental para el desarrollo de nuestras comunidades y merece el respeto y la protección de todos”
Ministerio de Educación
Fecode también se pronunció en contra del secuestro, sumándose al coro de indignación que demanda acciones inmediatas para garantizar la integridad de los maestros.
“Hacemos un llamado urgente a los responsables de este acto atroz para que respeten su integridad física y su vida, y garanticen su pronta liberación y retorno seguro a su hogar y a sus labores. Priorizamos el diálogo y el respeto por la dignidad humana en este difícil momento. Reiteramos nuestro compromiso inquebrantable de acompañamiento integral a la familia de la profesora Osorio y a toda la comunidad educativa afectada. Seguiremos atentos a las gestiones de las autoridades competentes para el esclarecimiento de los hechos”
Rosa Ena Soto Gámez, Secretaría de Educación Departamental de La Guajira
La comunidad espera ansiosa el pronto esclarecimiento de los hechos y el retorno sano y salvo de Janeth Rocío Osorio a sus labores, en un contexto donde la protección de los educadores se erige como prioridad ineludible para el progreso de La Guajira.

















