La Alcaldía de Tuluá anunció este viernes 15 de noviembre, a las 8:00 p. m., la adopción de medidas especiales de seguridad, orden público y movilidad en el municipio desde esa fecha hasta el martes 21 de noviembre a las 7:00 a. m., en respuesta al aval de la Corte Suprema de Justicia para la extradición de alias Pipe Tuluá a Estados Unidos. El anuncio, que se dio tras un Consejo de Seguridad Ordinario, busca garantizar la tranquilidad de la comunidad ante este proceso y coordina acciones institucionales para fortalecer la seguridad durante el periodo de vigencia de las medidas.
Las autoridades explicaron que estas medidas son resultado de un trabajo conjunto entre la Alcaldía y el Consejo de Seguridad Ordinario para responder a la situación de alto impacto en la seguridad pública de Tuluá. Se busca, además, optimizar la movilidad y reforzar la presencia institucional en las calles para prevenir incidentes y garantizar la convivencia diaria de los habitantes durante la etapa clave de extradición.
Medidas de seguridad y movilidad en Tuluá
Entre las disposiciones adoptadas se destaca la prohibición de la venta de combustibles en envases como pimpinas, botellas o galones, una medida dirigida a evitar usos inadecuados y congestiones que podrían derivar en incidentes durante la noche. Asimismo, se establece la venta de gasolina a motocicletas solamente entre las 5:00 a. m. y las 8:00 p. m., con restricción para el tramo de 8:00 p. m. a 5:00 a. m. del día siguiente, con el objetivo de reducir riesgos de manejo y accidentes en horarios nocturnos. Además, quedó prohibida la circulación de vehículos de carga y el transporte de escombros, cilindros de gas y trasteos durante estos días, con la finalidad de disminuir la congestión vial y prevenir posibles riesgos asociados a estas operaciones.
No hay declaraciones textuales en el material.
Este paso administrativo, impulsado por la Alcaldía de Tuluá y ratificado por el Consejo de Seguridad Ordinario, se enmarca en el contexto de la extradición de alias Pipe Tuluá a Estados Unidos y responde a la necesidad de mantener un control riguroso en Tuluá (municipio) durante el proceso. La medida de seguridad es vista como una respuesta institucional para garantizar tranquilidad y orden público, incrementando los controles y la vigilancia en la ciudad durante la vigencia establecida.

















