En el Ernesto Gutiérrez más de 20 unidades productivas del departamento exhibieron sus productos.
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Todo tipo de productos relacionados con la salud, las confecciones, la bisutería e incluso la línea de alimentos, entre otros, tuvieron un espacio en la feria de emprendimiento denominada ‘Sembradores de paz’, la cual es liderada por el Sena.
Francis Claudia Romero Valencia, de La Dorada, fue una de las personas que se hizo presente en esta feria, que se tomó el parque Ernesto Gutiérrez, donde cientos de manizaleños se acercaron a ser parte de esta fiesta comercial que buscaba promocionar el trabajo de 30 unidades productivas de población víctima del conflicto armado.
“Nosotros hacemos manillas, collares, aretes, anillos, todo lo que es de bisutería. Nosotras, con mis hijas, empezamos este trabajo desde hace varios años. El Sena nos ha capacitado y promueve espacios como este para vender nuestros productos. Han sido años muy buenos. Empezamos con poquito, pero vamos surgiendo”, dijo la señora Romero Valencia.
Estos emprendedores vivieron una exitosa jornada en la cual hubo también espacio para un taller de marketing digital y un desfile de modas, que sirvió para que se exhibirán las prendas confeccionadas por ellos mismos.
Cabe recordar que esta feria fue liderada por el Sena en varias zonas del país, en simultánea, con el fin de promover el crecimiento económico y el tejido empresarial local y nacional. Alrededor de 500 unidades productivas de todas las regiones se unieron en torno al emprendimiento.
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Un proceso de largo aliento
Al respecto, Carlos Alberto Ospina, subdirector del Centro para la Formación Cafetera, del Sena Regional Caldas, señaló que es un evento muy importante para el crecimiento de estas iniciativas comerciales.
“El Sena formula acciones para que la gente vulnerable tenga oportunidades de emprendimiento y desarrolla estos espacios para que la que la gente conozca estos productos y que los emprendedores puedan, no solo comercializarlos, sino establecer canales para afianzar relaciones comerciales”, destacó.
Acerca del trabajo con estas familias, el delegado regional del Sena explicó que son largos años de trabajo, los que han permitido consolidar el tejido.
“Es una cadena, nosotros los vamos llevando para que ellos se capaciten, se cualifiquen, mejoren sus productos y al final ellos tengan a quién venderle.
Llevamos muchos años trabajando con la población víctima de violencia. Son 20 años ya en un trabajo muy fuerte, en un programa especial y precisamente enfocado en población vulnerable”, puntualizó.
