El Servicio Geológico Colombiano reportó un sismo de magnitud 5.8 con epicentro en el municipio de Los Santos, en el departamento de Santander, ocurrido en la madrugada del 10 de diciembre de 2023 a las 03:27 hora local. Los datos preliminares indican que el movimiento telúrico se originó a una profundidad de 150 kilómetros, con coordenadas aproximadas de 6.85 grados de latitud norte y 73.14 grados de longitud oeste. Hasta el momento, no se han reportado daños materiales ni víctimas que lamentar por este evento.
Colombia se encuentra en una zona de alto riesgo sísmico debido a su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico, que alberga el 80 por ciento de los temblores más fuertes del mundo y el 75 por ciento de los volcanes activos del planeta. Este cinturón abarca una extensa región que incluye países como Argentina, Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Honduras, Guatemala, México, Estados Unidos, Canadá, Rusia, Japón, Taiwán, Filipinas, Indonesia, Malasia, Timor Oriental, Brunéi, Singapur, Papúa Nueva Guinea, Islas Salomón, Tonga, Tuvalu y Nueva Zelanda. El país andino está influenciado por dos áreas principales de subducción: la interacción entre las placas Nazca y Sudamericana, y la de Sudamericana con la placa del Caribe.
Los Santos, epicentro en una de las zonas más sísmicas del mundo
El municipio de Los Santos destaca como la segunda zona más sísmica del planeta, mientras que departamentos como Nariño, Chocó, Caldas y Santander registran una actividad telúrica constante. La intensidad de estos sismos se mide mediante la Escala Macrosísmica Europea, conocida como EMS-98, que clasifica los efectos desde el nivel 2, donde apenas se percibe el movimiento, hasta superiores a 7, que provocan daños severos en estructuras.
Historia de sismos devastadores en Colombia
La nación ha enfrentado en el pasado terremotos de gran magnitud con consecuencias trágicas. En 1868, los sismos de Ecuador-Colombia alcanzaron magnitudes de 6.3 y 6.7, dejando alrededor de 70.000 víctimas. El de Cúcuta en 1875, estimado entre 7.5 y 8.5, causó 461 muertes solo en territorio colombiano. En 1906, el movimiento en Esmeraldas de 8.8 generó un tsunami con 1.500 víctimas y olas de hasta cinco metros en Tumaco. Más recientemente, el sismo de Páez en 1994, de 6.4, provocó cerca de 800 fallecidos, y el del Eje Cafetero en 1999, de 6.2, dejó más de 1.000 muertos, 4.000 heridos, unos 500 desaparecidos y daños en 8.000 fincas cafeteras.
Autoridades y expertos recomiendan a la población mantener la calma, contar con planes de evacuación y reforzar las estructuras ante la posibilidad de réplicas, en un contexto donde la preparación sísmica sigue siendo clave para minimizar riesgos en esta región altamente activa.
