El sur de Bogotá fue escenario de un atropello múltiple durante la noche del 8 de noviembre que dejó once personas heridas, entre ellas cuatro menores. El taxista José Eduardo Chalá Franco, de 56 años, fue imputado por homicidio agravado en grado de tentativa y lesiones personales dolosas agravadas tras el atropello, y su captura fue legalizada por el Juzgado 45 de control de garantías. El hecho ocurrió en el barrio La Sierra, cuando el taxi Atos, con placa VDW 626, se desplazaba por la zona, y, según la investigación, conducía bajo los efectos del alcohol y perdió el control del vehículo. Chalá Franco acumulaba más de diez comparendos y violó la restricción de pico y placa que regía para esa placa durante la madrugada del 8 de noviembre.
Las autoridades detallaron que once personas resultaron lesionadas en este hecho, entre ellas cuatro menores de edad: un bebé de 4 meses, y niños de 7, 12 y 15 años. Dos de los menores se encuentran en estado crítico, con traumas en cabeza y abdomen, y reciben atención en los hospitales Santa Clara y La Victoria. Medicina Legal reporta que la embriaguez del conductor se ubicó en grado dos. En cuanto a las sanciones administrativas, podría imponerse una suspensión de la licencia de conducción por cinco años y una multa superior a 360 SMLDV, aproximadamente 15 millones de pesos. El vehículo corresponde al taxi de placas VDW 626, un Atos, y el suceso se produjo tras violar el pico y placa en vigor para el día.
La imputación y las medidas judiciales
La captura del conductor fue legalizada por el Juzgado 45 de control de garantías y, en la audiencia inicial, se imputaron cargos y se solicitó una medida de aseguramiento que se mantiene bajo reserva por la situación de los menores hospitalizados. La Fiscalía indicó que las diligencias se realizan con reserva y que el estado de las víctimas mantiene el centro de la investigación. Los antecedentes del imputado, que incluyen un historial de comparendos y antecedentes por conducir bajo efectos del alcohol, contrastan con la intensidad del hecho ocurrido esa noche.
«Al revisar el historial que le corresponde a este señor, se encontraba en pico y placa y además tiene un historial de comparendos que superan los diez por diferentes conductas» — General Susana Blanco, directora de la Policía de Tránsito
Por su parte, Juana Torres, prima de los menores atropellados, indicó que, según la Fiscalía, podría darse una libertad condicionada basada únicamente en lesiones personales; esa apreciación subraya el revuelo y la preocupación de las familias afectadas.
«Recibimos información de la Fiscalía de que es muy probable que este señor Eduardo Chalá, este taxista que provocó esta calamidad, esta película de terror para muchas familias, puede quedar en libertad solamente por lesiones personales» — Juana Torres, prima de los niños atropellados
Este caso, que mantiene a once personas heridas en hospitales y que provocó un debate sobre la necesidad de controles más estrictos para evitar incidentes similares, amplía la discusión sobre sanciones y políticas de seguridad vial en la capital. Las autoridades reiteran que la investigación continúa y que el proceso se enmarca en medidas de protección a las víctimas y a la comunidad, con diligencias concentradas para esclarecer las circunstancias exactas del atropello y las responsabilidades penales y administrativas que correspondan.

















