Desde la Casa Blanca, en Washington D.C., el expresidente Donald J. Trump elevó la voz contra el presidente de Colombia, Gustavo Petro, al señalarlo durante una conferencia de prensa que la residencia presidencial albergó como escenario de una nueva ronda de acusaciones entre los dos gobiernos. Trump calificó a Petro de “matón” y “hombre malo” y afirmó que la cocaína y las fábricas de drogas en la región son un problema que, según su visión, debe enfrentarse con medidas serias. En respuesta, Petro no tardó en manifestarse desde sus redes sociales y anunció que defenderá ante la justicia estadounidense las calumnias que, a su juicio, se han vertido contra su persona, recurriendo a abogados de Estados Unidos para sustentar su caso. En la escena estuvieron presentes funcionarios como el Secretario de Estado de Estados Unidos y el Embajador de Colombia en Washington, Daniel García-Peña, y hay una fotografía de la reunión que, curiosamente, muestra también a Edward Kennedy entre los retratos que rodeaban la sala.
El choque se produjo en un contexto de tensiones históricas entre ambas naciones por el narcotráfico, la cooperación bilateral y la designación venezolana como narcoterrorista. En paralelo a las declaraciones de alto nivel, el Congreso colombiano informó una votación de 72 a 20 para designar al régimen venezolano como una organización narcoterrorista, un movimiento que, según analistas, refuerza la línea más dura de la región frente a Caracas. A partir de hoy, Trump indicó que “hemos interrumpido todos los pagos a Colombia”, una señal de presión que añade un componente económico al ya tenso intercambio. Este cruce de mensajes llega en un momento en que la relación entre Washington y Bogotá ha pasado por fases de cooperación estrecha y por momentos de fricción, en particular en la arena antidrogas y en la evaluación de la cooperación en seguridad regional.
Escalada de acusaciones y defensa legal
Entre las declaraciones más destacadas está la réplica de Petro, quien sostuvo que no es un matón sino un demócrata, y dejó claro que buscará defenderse de las acusaciones ante la justicia estadounidense. En su propio discurso público afirmó: “No soy un matón, soy un demócrata” y repitió la idea en inglés, “I’m not a bully, I’m a democrat”, para enfatizar su postura ante una acusación que él considera injusta. Petro adelantó que, ante las calumnias que ha recibido en territorio de los EE. UU., se defenderá judicialmente con abogados estadounidenses ante la justicia estadounidense y subrayó su disposición a colaborar cuando sea necesario para luchar contra el narcotráfico. En su discurso añadió que, cuando requieran su ayuda para enfrentar esa problemática, la sociedad estadounidense contará con la colaboración de Colombia, y afirmó que siempre estará en contra de genocidios y asesinatos del poder en el Caribe.
“Él es un matón y es un hombre malo, y ha perjudicado mucho a su país. Les está yendo muy mal en Colombia. Producen cocaína. Tienen fábricas de cocaína. Cultivan todo tipo de porquerías que son drogas, drogas malas que entran a Estados Unidos, generalmente a través de México, y más le vale cuidarse, o tomaremos acciones muy serias contra él y su país; él ha convertido a su país en una trampa mortal” – Donald Trump.
“No soy un matón, soy un demócrata” – Gustavo Petro.
“I’m not a bully, I’m a democrat” – Gustavo Petro.
“De las calumnias que me han lanzado en el territorio de los EE. UU., altos funcionarios; me defenderé judicialmente con abogados estadounidenses en la justicia estadounidense” – Gustavo Petro.
“Cuando requieran nuestra ayuda para luchar contra el narcotráfico, la sociedad estadounidense, la tendrá. Lucharemos contra los narcotraficantes con los estados que quieran nuestra ayuda” – Gustavo Petro.
“El único problema en Colombia es un lunático, el tipo está loco. Está loco y no está bien. Y todos lo saben. Es muy impopular en Colombia. No sé si vieron hoy que el Congreso colombiano votó, creo que fue algo como 72 contra 20, para designar al régimen venezolano como una organización narcoterrorista” – Secretario de Estado de EE. UU.
“A partir de hoy hemos interrumpido todos los pagos a Colombia” – Donald Trump.
“Desafortunadamente, el tratamiento es similar al que están haciendo con Maduro” – Daniel García-Peña, Embajador de Colombia en Washington.
“acusar a Petro de capo del narco ‘no tiene ni pies ni cabeza’ y advirtió que esa postura es ‘peligrosa’” – cita contextual del embajador.
“Me defenderé judicialmente en Estados Unidos de las calumnias que me han lanzado” – Gustavo Petro.
“Me defenderé judicialmente con abogados estadounidenses en la justicia estadounidense” – Gustavo Petro.
El contexto necesario para entender este episodio es la larga alianza entre Colombia y Estados Unidos en la lucha contra el narcotráfico, que, sin embargo, se ve marcada por tensiones políticas de alto nivel. Explicaciones oficiales señalan que la noticia llega ahora por la escalada de acusaciones entre Petro y Trump, la anunciada defensa legal en Estados Unidos y las acciones de Washington sobre pagos y designaciones. Se advierte que el desenlace podría afectar la cooperación fiscal y de seguridad, y que el debate sobre los límites de la inmunidad y la difamación en casos internacionales podría ganar protagonismo en los próximos días.
Entre los datos secundarios, el Embajador García-Peña ha condicionado su lectura de los hechos al considerar “similar” el trato recibido por Petro respecto a Maduro y sostuvo que acusar a Petro de capo del narco “no tiene ni pies ni cabeza” y que tal postura es peligrosa. Con esa perspectiva, analistas señalan que la inmunidad presidencial de Trump y la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos podrían complicar eventuales demandas por difamación o calumnia, lo que añade una capa jurídica adicional a la controversia y a la manera en la que ambos Gobiernos pretenden manejar la disputa pública en una etapa de alta exposición mediática. En definitiva, la noticia de hoy abre un capítulo más en una relación bilateral marcada por la cooperación antidrogas, la presión internacional y la defensa de la imagen diplomática en un escenario global cada vez más interconectado.