La Unidad de Gestión del Riesgo (UGR) de Manizales avanza en la recuperación y evaluación técnica de una obra de mitigación afectada en el barrio La Sultana, con el objetivo de garantizar la seguridad de la comunidad y prevenir deslizamientos o incidentes asociados a las condiciones del terreno.
La intervención comenzó gracias al reporte oportuno de la ciudadanía, lo que permitió la articulación inmediata con Corpocaldas, la Secretaría de Infraestructura, y Aguas de Manizales, en el marco del Sistema Municipal de Gestión del Riesgo.
“Las afectaciones, como agrietamientos y fracturas en canales, cunetas y bajantes, están directamente relacionadas con el tipo de suelo arcilloso y el exceso de lluvias de este año, lo que ha provocado expansión del terreno y debilitamiento de estructuras construidas hace más de 20 años”, explicó Diego Armando Rivera Gutiérrez, director de la UGR.
Evaluación técnica y acciones preventivas
Durante la inspección, se descartaron fallas en el sistema de acueducto y alcantarillado, y se dio inicio al levantamiento topográfico para definir las obras definitivas. Mientras tanto, la UGR ejecuta acciones preventivas como:
- Monitoreo constante de la ladera
- Recubrimiento con plástico para evitar el ingreso de agua lluvia
- Canalización temporal de aguas superficiales hacia el sistema urbano
Asimismo, se realizan estudios de suelo y perforaciones técnicas que permitirán a Corpocaldas diseñar las intervenciones estructurales definitivas.
Trabajo articulado con la comunidad
La UGR destacó el acompañamiento activo de la comunidad, a la cual se le ha socializado cada etapa del procedimiento. Por el momento, no es necesaria una evacuación del sector, pero se mantendrá el monitoreo permanente para garantizar la seguridad.
“El compromiso es claro: proteger la vida y la integridad de los habitantes mediante un trabajo conjunto, técnico y responsable”, concluyó Rivera Gutiérrez.
Esta intervención hace parte del plan de acción integral de la Alcaldía de Manizales para mitigar riesgos geotécnicos en zonas sensibles y fortalecer la resiliencia territorial frente al cambio climático y la variabilidad de las lluvias.
