El Consejo Ampliado de Gestión del Riesgo dejó anuncios importantes para el departamento. La UNGRD aportará maquinaria, ayudas humanitarias y recursos para proyectos de mitigación.
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Culminó en Caldas el Consejo Ampliado de Gestión del Riesgo, un espacio que reunió al gobernador Henry Gutiérrez, al director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Carlos Carrillo, a varios alcaldes del departamento y a organismos de socorro.
El encuentro dejó importantes anuncios para la atención de emergencias y la prevención de desastres en la región.
El Director de la UNGRD confirmó el envío de “2.000 horas de maquinaria amarilla no solamente a los municipios de Supía y Riosucio sino también para todo el departamento”. Esta intervención buscará apoyar las labores de remoción de escombros, adecuación de vías y atención de emergencias en distintas zonas de Caldas.
A esto se suma el compromiso de brindar asistencia humanitaria de emergencia, a través de la entrega de ayudas y el fortalecimiento del banco de materiales para las familias afectadas por desastres recientes.
También se anunció la entrega de subsidios de arrendamiento por un periodo inicial de 90 días, prorrogables por 90 días más, para quienes han perdido sus hogares. “Vamos a pagar también los subsidios de arrendamiento de las familias que hoy han perdido sus hogares”, dijo Carrillo.
Uno de los anuncios más relevantes fue el compromiso de adquirir maquinaria amarilla por un valor de $10.000 millones, una inversión que será compartida por partes iguales entre la Nación y la Gobernación de Caldas. “Es un compromiso que no podemos costear con el dinero de este año, señor gobernador, pero que vamos a priorizar para los recursos de la próxima vigencia”, precisó el funcionario.
El fortalecimiento de los sistemas de alerta temprana también fue parte de la agenda. “En el caso de Riosucio vamos a plantear sistemas de alerta temprana comunitaria”, señaló Carrillo, subrayando la importancia de implementar herramientas que permitan una respuesta más oportuna ante posibles emergencias.
En ese mismo municipio, la UNGRD trabaja en un convenio con enfoque étnico para mejorar la gestión del riesgo, teniendo en cuenta las particularidades culturales del territorio. Aunque el alcance es limitado, se espera que contribuya a una respuesta más efectiva y localizada.
Para Supía, se anunció la destinación de $2.000 millones para un proyecto de soluciones basadas en la naturaleza, con el objetivo de reducir riesgos y mitigar los efectos de eventos como deslizamientos e inundaciones. Este tipo de intervenciones combinan ingeniería con restauración ambiental.
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En resumen, los compromisos de la UNGRD incluyen:
- 2.000 horas de maquinaria amarilla para varios municipios
- Asistencia humanitaria de emergencia y banco de materiales
- Subsidios de arrendamiento por tres meses, prorrogables
- Compra futura de maquinaria amarilla por \$10.000 millones (mitad Nación, mitad Gobernación)
- Sistemas de alerta temprana, con enfoque comunitario en Riosucio
- Convenios con enfoque étnico para gestión del riesgo
- $2.000 millones para obras de mitigación en Supía
