Víctor Hugo Ruiz convive con su expareja en Cali; disputa por vivienda continúa

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En Cali, Víctor Hugo Ruiz, conocido actor y director de cine, convive en el mismo apartamento con su expareja Manuela, a pesar de la ruptura ocurrida hace más de dos años, una situación que se mantiene abierta por disputas jurídicas y económicas relacionadas con la vivienda que comparten.

Según la revisión de la entrevista realizada por La Red y las publicaciones en sus redes sociales, la convivencia entre Ruiz y su expareja se mantiene en clave de “roomies”: viven en habitaciones separadas, no comparten mesa ni una comunicación habitual y el actor evita encuentros para reducir tensiones. La última convivencia con participación de ambos ocurrió en diciembre de 2022, cuando aparentemente se trasladaron a la vivienda en Cali. Las tensiones también se traducen en movimientos financieros que, según la versión de Ruiz, figuran a nombre de la expareja, y en una disputa económica por un inmueble que motivó una conciliación en marzo ante la Personería, donde la ex solicitó cien salarios mínimos como compensación por el apartamento.

La convivencia en Cali y la disputa por la vivienda

La información indica que la ruptura se arrastra desde hace más de dos años y que, durante el último año y medio, han dormido en habitaciones separadas sin volver a compartir una convivencia plena. Ruiz ha insistido en que la relación íntima dejó de existir hace años y que la última experiencia de mesa compartida o convivencia ocurrió en diciembre de 2022, cuando regresaron a su casa en Cali. En las declaraciones, el actor señala que su presencia en eventos públicos y compromisos se debe a vínculos comerciales y que, en la práctica, la relación está marcada por distanciamiento y precauciones para evitar encuentros forzados.

«estamos separados bajo el mismo techo. Yo empecé a ir a eventos solo y hasta sus mismas amigas me decían que por qué no lo hablábamos, a ver si podíamos volver. Pero yo no quiero volver porque tengo mis razones jurídicas» – Víctor Hugo Ruiz, actor y director

Asimismo, Ruiz describe un entorno en el que ya no hay techo común y donde la relación íntima quedó suspendida hace mucho tiempo. Refiere que, debido a una dinámica de la relación, la convivencia se reduce a vínculos estrictamente necesarios para acuerdos comerciales y gestiones legales, con el objetivo de proteger intereses económicos y evitar nuevos desencuentros. En ese marco, el actor señala que posiblemente mantiene una relación sentimental en otro plano, lo que, según su versión, no define la situación real de la convivencia en el inmueble de Cali.

«Techo no tenemos hace mucho, nuestra relación íntima era árida, no teníamos relaciones hace mucho, y hace más de tres años que cero… lo que es mesa y convivencia la última vez fue en diciembre de 2022, que fuimos a mi casa en Cali. Solo por vínculos comerciales aparecemos en eventos o compromisos, pero hace año y medio cero de todo» – Víctor Hugo Ruiz, actor y director

«Estoy saliendo con alguien, y la versión de ella es que yo la dejé por esta persona, y eso no es así, no es cierto» – Víctor Hugo Ruiz, actor y director

«Una vez ella me dijo: ‘Yo no me voy de aquí hasta que me pagues’» – Víctor Hugo Ruiz, actor y director

«Ante escritura pública, yo estoy soltero. Ella es quien está haciendo la reclamación, me toca esperar. Tuvimos una conciliación en marzo en la Personería, y ella pidió cien salarios mínimos, que era el tope, por un apartamento» – Víctor Hugo Ruiz, actor y director

El contexto describe a Ruiz como una figura pública que ha coordinado su vida entre la exposición mediática y un conflicto privado de larga duración. La fuente de declaraciones se consolidó en una entrevista para La Red, y las referencias públicas señalan las publicaciones del actor y su presencia en Instagram bajo el usuario @victorhugoruizp/IG, con créditos de fotos que acompañan las notas. Este cúmulo de información da cuenta de un proceso judicial y de una negociación en curso, con una demanda económica que asciende a cien salarios mínimos y una conciliación en marzo que, al cierre de esta nota, continúa sin resolverse a favor de ninguna de las partes.

En síntesis, la noticia que se mantiene vigente es la persistencia de la convivencia en el mismo inmueble de Cali entre Ruiz y su expareja, una situación que no ha llegado a una resolución definitiva y que continúa afectando la dinámica entre ambas partes. La tensión derivada de préstamos y reclamaciones, junto con la conciliación en curso ante la Personería, configura un escenario de conflicto que, pese a la distancia física, mantiene su incertidumbre jurídica y económica en un plano que continúa siendo objeto de seguimiento periodístico.

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