En la noche del 28 de diciembre, la comunidad de la localidad de Bosa en Bogotá protagonizó un tenso episodio de justicia por mano propia al incendiar la motocicleta de dos presuntos ladrones que acababan de asaltar a dos ciclistas. Los vecinos, acorralados por el hartazgo ante la recurrente inseguridad en el sector, persiguieron a los delincuentes hasta que estos abandonaron el vehículo, momento en que un residente lanzó gasolina y le prendió fuego, generando llamas y humo que se viralizaron en redes sociales. La oportuna intervención de la Policía Metropolitana de Bogotá evitó que el incidente escalara a un linchamiento, permitiendo la captura de los presuntos responsables sin que sufrieran agresiones físicas mayores.
El suceso refleja la creciente exasperación de los habitantes de Bosa, un barrio conocido por los altos índices de hurtos y violencia, especialmente peligroso para quienes no residen allí. Los vecinos reclaman una mayor presencia policial para enfrentar los atracos callejeros que azotan la zona, en un contexto donde la capital del país lidia con cifras alarmantes de inseguridad: según el informe de Bogotá Cómo Vamos de diciembre de 2025, el 62 por ciento de los bogotanos se siente inseguro, el máximo registrado desde 2008, con un 63,7 por ciento de mujeres en esa percepción, el 43 por ciento reconociendo inseguridad en su propio barrio y el 72,7 por ciento señalando los atracos como principal preocupación. En lo corrido de 2025, se reportaron 116.469 casos de hurto a personas, un incremento de 1.310 respecto al año anterior.
Cifras que evidencian la crisis de seguridad en la capital
Este episodio en Bosa no es aislado, sino un reflejo de la ola de delitos repetidos que ha llevado a la ciudadanía al límite, aunque las autoridades insisten en no tomar justicia por cuenta propia para evitar tragedias mayores. La policía logró controlar la multitud y detener a los implicados, subrayando la necesidad de canales institucionales para combatir la delincuencia.
“los agredidos vienen en bicicleta. Empiezan como una discusión, como a intercambiar insultos, golpes (con los presuntos ladrones) y en medio de eso uno de los agredidos se lanza, lanza gasolina y le prende la moto donde estaban los muchachos”
Testigo, entrevistado por Citytv
Las imágenes difundidas en redes sociales capturaron el momento de las llamas devorando la motocicleta, avivando el debate sobre cómo fortalecer la seguridad en sectores vulnerables como Bosa, donde la comunidad demanda acciones concretas de las autoridades para recuperar la tranquilidad en sus calles.
