Una volqueta abandonada en el barrio Prados de Alcalá, en Tunja, cargada con 24 tatucos llevó a detonaciones controladas para neutralizar un posible ataque al Batallón Simón Bolívar. El operativo dejó dos soldados lesionados y no hubo víctimas mortales entre la población; la alarma se activó a las 5:30 a.m. del 8 de noviembre. El vehículo habría transitado el 27 de octubre por la ruta Paipa–Tunja, pasando por el peaje de Tuta alrededor de las 5:30 p.m., y la carga incluía una plataforma no convencional para el lanzamiento de tatucos. Durante la intervención se detonaron tres dispositivos de forma controlada y parte de la carga fue proyectada hacia las instalaciones del Batallón, lo que llevó a evacuar a personas en un radio de 1.5 kilómetros.
Las autoridades señalan que se investiga un posible atentado y se estudia la eventual utilización de drones con granadas. La investigación señala que la volqueta habría sido vendida hace unos días y habría salido de Sogamoso transportando arena. Se continúa el rastreo del origen y de los responsables, en un esfuerzo coordinado entre la Policía Metropolitana de Tunja, el Ejército y la Alcaldía de Boyacá. En paralelo, se anunció una recompensa de 100 millones de pesos por información que conduzca a la captura de los responsables, y se avanzan las pesquisas para reconstruir el recorrido de la volqueta y su carga. Las autoridades reiteraron que no hubo víctimas civiles, aunque sí daños materiales en las instalaciones del Batallón.
Detonaciones controladas, evacuaciones y recompensa para esclarecer el caso
La operación dejó como saldo dos soldados lesionados y daños materiales en las inmediaciones del Batallón Simón Bolívar; no se reportaron fallecidos entre la población. Se confirmó que tres artefactos fueron detonados de forma controlada y que parte de la carga expulsó cilindros hacia el interior de las instalaciones militares. Las autoridades enfatizan que continúa la investigación para determinar si hubo un intento de ataque coordinado y si existen vínculos con drones o con otros dispositivos, además de la revisión del origen y ruta de la volqueta que habría salido de Sogamoso cargada con arena unos días antes.
«Nos encontramos a dos cuadras del Batallón Bolívar, en el barrio Prados de Alcalá, con la tranquilidad de que no tenemos ningún herido de gravedad» – Carlos Amaya, gobernador de Boyacá
«No bajar la guardia y golpear al narcotráfico donde le duele: en sus finanzas, en sus mercancías ilícitas, en sus capos y en su capacidad de afectación a la población civil» – Gustavo Petro, presidente
Las autoridades destacan la importancia de la coordinación entre Policía, Ejército y Alcaldía para continuar las investigaciones y reforzar la seguridad en la zona. Se mantiene el seguimiento de posibles indicadores de drones o artefactos adicionales y se reiteran los esfuerzos para identificar el origen de la volqueta, la trayectoria tomada y los responsables, con la intención de esclarecer por completo este intento de ataque y evitar que se repita en el futuro.

















